Un trabajador del centro de menores de Ateca declara que siguió las "instrucciones y enseñanzas" del anterior supervisor, último imputado
El lunes fue detenido en Madrid y trasladado a declarar a Calatayud donde la jueza lo dejó en libertad provisional
Centro de Menores de Ateca / Cadena SER
Zaragoza
Varios ex usuarios del centro de menores de Ateca y un trabajador señalan al antiguo supervisor como conocedor de los graves abusos a los que supuestamente eran sometidos los jóvenes. Es más, uno de estos empleados declaró que siguió sus "instrucciones y enseñanzas" durante meses. El lunes fue imputado como investigado.
Apuntala esta imputación con varias declaraciones de menores que fueron usuarios en este centro, que aseguraron en el juzgado que informaron "directamente" al ahora investigado de ciertos abusos y que éste no hizo nada respecto a sus trabajadores. Misma circunstancia aseguró uno de los trabajadores detenidos que afirmó que durante varios meses siguió sus "instrucciones y enseñanzas".
También recoge este documento que este hombre acompañó a una menor a denunciar una presunta agresión sexual por parte de otros usuarios del centro. El antiguo supervisor aseguró que tras la denuncia se abrió expediente que se remitió a servicios sociales de Aragón. Sin embargo, ese documento no se encuentra en los archivos que se enviaron al juzgado. Algo, asegura la jueza, "pone seriamente en duda la credibilidad de su testimonio".
La jueza consideró en su auto de libertad que era "cooperador necesario" de los delitos de lesiones, torturas, contra la integridad moral y agresión sexual. Le añade también el delito de omisión de socorro de estos mismos ilícitos.
Este nuevo investigado fue detenido el lunes en Madrid y llevado al juzgado de Calatayud a declarar. Tras su comparecencia, quedó en libertad sin pasaporte y con obligación de personarse en el juzgado cada lunes. Este hombre, que estuvo trabajando en el centro desde su apertura hasta junio de este año, declaró que no era conocedor de la existencia de abusos físicos, psicológicos o sexuales a los usuarios y niega también que tuviera capacidad de decisión o sanción.
A principios de agosto se detuvo a cinco trabajadores de este centro, incluido el supervisor en ese momento, como supuestos autores de los delitos de torturas, agresión sexual o lesiones, entre otros delitos. Estos cinco continúan en prisión provisional.
