El buen ambiente colorea la previa del partido ante el Burgos

Zaragoza

La próxima jornada debe ser la definitiva para el Real Zaragoza, siempre y cuando sea capaz de ganar en casa al Burgos. Se situaría con 49 puntos, en unos números de salvación virtual. La plantilla vive las horas previas dentro de un buen ambiente en los entrenamientos, son conscientes de lo que tiene en su manos, pero han reforzado su optimismo con la victoria y el empate sumados en las dos salidas consecutivas que han tenido, en Huesca y en casa del líder Leganés.

El Real Zaragoza-Burgos será el penúltimo partido de la jornada; es decir, antes habrán jugado todos los rivales directos porque el choque que cerrará será el Tenerife-Racing de Ferrol. Pero los blanquillos no quieren mirar que ocurre en otros campos a lo largo del fin de semana. Víctor Fernández afronta el encuentro sin Marc Aguado, que se ha unido a la larga lista de lesionados (Borge, Nieto, Francho, Mollejo, Guti, Lecoecuhe y Rebollo). Sin embargo, recupera a Mouriño, tras cumplir un partido de sanción por las dos amarillas que vio en El Alcoraz,

Jugadores y cuerpo técnico terminarán de preparar este sábado en la Ciudad Deportiva la cita del domingo en La Romareda, donde se espera una gran entrada y una temperatura en torno a los 30 grados. El Burgos llega con la vitola del segundo peor visitante de la categoría, pero con la necesidad de ganar para continuar vivo en su escalada hacia los puestos de play-off de ascenso.