Inocencio, usuario del servicio de comedor de los centros de convivencia de Mayores de Zaragoza: "Yo vengo por la compañía"

Zaragoza

De lunes a domingo y a las 13.30 horas, el Centro de Convivencia de Mayores de la Jota tiene las mesas listas para ofrecer el servicio de comedor. Con una capacidad de 60 personas, cerca de medio centenar de usuarios comen allí todos los días.

El menú de hoy lunes: alubias blancas con verdura, alitas de pollo asadas y fruta. Aunque como reconoce Inocencio, lo de menos es lo que comes, porque él va al centro "por la compañía, esto es como una familia".

Inocencio es viudo. Vive con sus 2 hijas que se marchan pronto a trabajar. Dice que estuvo un tiempo comiendo en casa, "ellas me dejaban la comida hecha, pero luego empecé a venir aquí, y al final mucho mejor para todos".

La historia de Inocencio, no es la única. Isabel lleva 10 años sola y desde entonces va a comer al centro junto a otras amigas como Ana o Mª Jesús que acude diariamente junto a su marido. Ellos tomaron la decisión de ir por sus achaques y porque no pueden coger peso.

Como explicaba la directora del centro, Isabel Navarro, el objetivo de estos comedores es no sólo ofrecerles un menú saludable y nutritivo sino hacerlo en un espacio en el que comer acompañados. Es un recurso dirigido a paliar la soledad no deseada, siendo muchas veces el comedor la puerta de entrada al establecimiento de nuevas relaciones sociales.

El centro de Convivencia de Mayores de La Jota fue el primero en poner en marcha un servicio de comedor. Fue una reclamación de los vecinos que luego se extendió a otros espacios.

El servicio de comedor está disponible en 8 centros de mayores. En próximos días, llegará a 3 centros más: Salvador Allende en las Fuentes, Terminillo y el nuevo centro casco Histórico Luis Buñue.