Se cumplen 20 años de la gran gesta de Eliseo Martín en el Mundial de París

Huesca

Eliseo Martín ha conseguido sin duda el éxito más destacado del atletismo altoaragonés y fue ya hace 20 años. El 26 de agosto de 2003 fue capaz de luchar contra la armada africana en una prueba en la que los europeos no podían echar mano a las medallas en las grandes citas internacionales, algo que consiguió el montisonense en una carrera espectacular y llena de emociones.

Fue un gran día para Eliseo Martín, para su entrenador Fernando García Herbera “Phondy“ y para Monzón y todo el Alto Aragón en general.

Hoy, al cumplirse 20 años, Eliseo Martín lo recordaba así en sus redes sociales: “Hoy se cumplen 20 años de un día mágico para mí, incluiría a mucha gente cercana que me rodeaba y en especial a Phondy, mi entrenador que fue el culpable de conseguir que creyera que podía luchar por una medalla mundialista”.

Y añade que “aquel día salte a pista convencido de que, dando mi mejor versión, podía estar en la última vuelta, con opciones a las medallas” y también recuerda como fue desde dentro. “Fue una carrera algo caótica, ya que se salió a ritmo de récord del mundo. Supe contenerme y plasmar los ritmos de paso que correspondían y ver que a falta de 500m éramos cinco los que optábamos a las medallas. Por delante el que era recordman del mundo "Saif" y "Kosguei", el keniata que más campeonatos del mundo ha ganado. Junto a mi compañero Luismi, entrábamos en la última vuelta con todas las opciones, yo notaba que tenía fuerzas y que podía pelear. Cuando cambiaron de ritmo los favoritos, arrranque a tope y me dije, "esta es la oportunidad que siempre he estado esperando, no se me puede escapar!", salí de la ría tercero algo destacado del francés Tari, lo que me hizo aflojar un poco antes del último obstáculo y cambiar a mi pierna buena para evitar algún susto y asegurar esa medalla. Corrí 40 metros con los ojos cerrados escuchando el ruido ensordecedor del público y cuando los abrí estaba ya en los últimos 15 metros más importantes de mi vida, en los que te pasan tantas cosas por la cabeza en tan poco tiempo!”, recuerda un emocionado Eliseo.

“Sabía que había hecho historia, que mucha gente estaría feliz por ello, que mi pueblo, Monzón, estaría orgulloso de su paisano, son momentos que no tienen precio de una felicidad inmensa y todo ello porque te ha costado muchísimo sacrificio, pero por fin con una gran recompensa”.

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“Todos tenemos un día especial que marca nuestras vidas y para mí fue aquel 26 de agosto de 2003. En estos 20 años multitud de gente me conto como vivieron aquel momento y quería agradecerles todo ese cariño que para mí es la parte más especial de aquella medalla”, concluye Eliseo Martín que recuerda esa medalla de bronce histórica para el atletismo altoaragonés.