La cláusula de la discordia
Aday Mara jugará la próxima temporada en la universidad estadounidense de UCLA aunque Casademont Zaragoza se mantiene firme en su postura inicial apelando al contrato firmado
Aday Mara tras conseguir una canasta en el pabellón Príncipe Felipe / ACB photo
Zaragoza
Apenas 24 horas después de despedirse del club y de la marea roja a través de sus redes sociales, la universidad de UCLA formalizó el fichaje del pívot de 18 años, una de las más firmes promesas del baloncesto europeo.
Mara comunicó a los dirigentes de Casademont hace dos meses su intención de jugar la próxima temporada en Estados Unidos para continuar con su progresión deportiva y académica.
El club, desde ese momento y a través de un comunicado, remitió al jugador al contrato firmado y a una la cláusula económica para rescindir el contrato estimada en unos 600.000 euros, dando por hecho que se iría a un equipo profesional, pero Aday Mara jugará en una universidad americana, donde los jugadores no son profesionales y no tienen salario, por tanto no sería un equipo profesional.
Es lo que entiende su familia y entorno y por tanto que no deben pagar cantidad alguna, aunque desde hace un tiempo los jugadores universitarios pueden recibir hasta un millón de dólares a través de diferentes patrocinios externos a la propia universidad y al equipo, y es ahí donde surgen las discrepancias y las interpretaciones sobre dicha cláusula.
El pívot zaragozano recibirá una buena cantidad económica pero no directamente de la universidad de UCLA. Así las cosas, sin un acercamiento poco probable entre ambas partes, será la justicia la que ponga en valor la interpretación de la cláusula de desenganche.
