El sector turístico de los deportes de aventura agradece a la CHE su ayuda en esta época de sequía
Reconocen que su gestión garantiza la actividad turística, que supone un valor económico de casi 29 millones de euros
Eduard Julbert, secretario de la Asociación Turismo Deportivo de Aragón
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Huesca
Las diferentes asociaciones de la Cuenca del Ebro de Turismo Activo han mostrado su agradecimiento a la Confederación Hidrográfica del Ebro por tener en cuenta los usos turísticos en la gestión de los caudales en momentos de especial crisis climática que llevan a una situación de sequía y escasez que provoca restricciones y reajustes que pueden imposibilitar el desarrollo económico generado alrededor de las actividades de aventura, especialmente en torno a los ríos de Aguas Bravas y sus embalses, como los ríos Alto Ebro, Gállego, Ésera, Noguera Pallaresa, Noguera Ribagorzana, Ebro, así como los embalses de Mediano, El Grado, Linsoles o Mequinenza.
Existe una fuerte actividad económica basada en los aprovechamientos hídricos que, aunque se consideran lúdicos, son generadores de riqueza. De hecho, se calcula que en los ríos de la cuenca del Ebro se realizan unas 825.000 actividades, con un valor económico directo de casi 29 millones de euros (sin incluir el turismo generado en pantanos, como canoa, pesca, kite-surf o actividades acuáticas). Actividades que se desarrollan fundamentalmente en áreas rurales, posibilitando nuevos yacimientos de empleo y contribuyendo a la dinamización económica de estas zonas.
Eduard Julbert, secretario de la Asociación Turismo Deportivo de Aragón, agradece a la CHE “por acordarse de ellos y no arruinarlos, ya que son empresas pequeñas, y un año de sequía y sin agua podría suponer la debacle para todo el sector”.
La gestión del agua en situaciones de sequía es un asunto crucial que afecta a muchos sectores. Por ello, destacan la labor de la Confederación Hidrográfica del Ebro en la mediación y establecimiento de puentes entre los diferentes actores, sindicatos de riego, hidroeléctricas, usos industriales, etc. Su alta capacidad de gestión ha permitido un diálogo y la búsqueda de un máximo consenso para garantizar en la medida de lo posible, aunque con altas restricciones debidas a la gravedad de la sequía, la actividad turística y, así, posibilitar la continuidad de este tipo de actividades de turismo de aventura y su mínima sostenibilidad.
Las asociaciones de la Cuenca del Ebro de Turismo Activo que han mostrado su agradecimiento son Cantabria Activa, Aktiba, Turismo Deportivo Aragón (TDA), Asociación del Noguera Pallaresa, así como otras de Cataluña, ATACYL de Castilla y León, Asociación Navarra de Empresas de Actividades Turísticas.
