Las grullas se han visto sorprendidas por las heladas
Preparaban su marcha a los países nórdicos y ya habrían cumplido el plazo de repostaje en la Laguna de Gallocanta, pero el frío les dificulta poder encontrar las corrientes de aire cálido que necesitan para alzar el vuelo
Luz Morcillo Calero
Zaragoza
En este momento se estiman unas 25.000 grullas en el espacio protegido de La Laguna de Gallocanta, más de las que sería normal en estos días. Algunas aprovechan cuando se abre un claro en el cielo para alzar el vuelo, pero la mayoría no han podido salir.
Buena noticia para los visitantes que podrán seguir disfrutando de su espectacularidad, pero no así para los animales, que ven alterado su ciclo. La educadora medioambiental en el Centro de Interpretación, Carmina Franco, afirma que "corre prisa" porque deben "reclamar sus territorios y poder empezar la cría". Además, explica que las grullas en esta época del año en la Laguna de Gallocanta "no están a gusto porque "todo esto es un trastorno para ellas".
El cielo se cubre por las noches y ya son muchas soportando estas bajas temperaturas. Su aeropuerto parece que, por ahora, permanecerá cerrado a la espera de esas corrientes más cálidas que les permitan migrar.
