Un Almería en alerta para ir a Burgos

Con el cuchillo a Burgos. La UD Almería no puede permitirse tropezar en El Plantío si quiere dar continuidad a la victoria frente al Real Zaragoza e intentar meterse en posiciones de Play Off. Con la baja confirmada de Leo Baptistao y la duda hasta última hora de Sergio Arribas por gastroenteritis, la plantilla de Rubi viaja consciente de que el fútbol le vuelve a dar una gran oportunidad. Quiere el técnico que los futbolistas hayan aprendido de los desplazamientos a Albacete, A Coruña y en especial Eibar: “Aviso a navegantes, al vestuario. Volvemos a jugar fuera de casa y queremos una victoria en Burgos para demostrar a nuestros rivales que seguimos sumando puntos. Nos va a servir el aprendizaje de las últimas salidas. El Plantío se hace muy complicado para los visitantes. Si salimos con la piruleta pues nos la van a hacer”.

Impredecible

Esta Segunda es de locura, no hay guion y desde el décimo al primero todos piensan que hay posibilidades de ascender por ambas vías. Rubi reconoce que le está sorprendiendo que tantos clubes estén aguantando el sprint final y no cree que alguno se vaya a caer de golpe. Esto provoca que la puntuación se más baja: “Una vez se me ha pasado el susto porque no esperaba tantos equipos metidos ahí arriba, sí que hay uno con el que me saco el sombrero y es el Mirandés. Me preguntaban si creía que aguantaría arriba y dije que sí. Que seamos muchos quiere decir que se va a ir recortando la puntuación para las posiciones de ascenso directo”.

Estilos

El Burgos tiene un estilo muy diferente al del Almería. Todos los triunfos con Ramis se saldaron por la mínima y a los rojiblancos les van más los partidos abiertos. Rubi felicita al cuerpo técnico rival por la capacidad de sacar el máximo rendimiento al equipo y enseñar que hay muchos sistemas válidos para llegar a los objetivos: “Lo que miramos es nuestro calendario y hay una serie de partidos marcados con asterisco y otra serie en la que si sacas el 50% de los puntos nos puede dar. Eso es solo por encima, ya que solo pensamos en el Burgos. Tiene una seña de identidad de Ramis, con solidez y que con pocos goles saca resultados. Es otra forma válida de ganar. La nuestra, por perfil, no es protegerse”.

Necesidad

No se fía Rubi de nada ni de nadie. Aquí todo puede cambiar para bien o para mal en un fin de semana y necesita que el Almería dé ese paso adelante que le haga entrar de nuevo entre los seis primeros. De hecho, apunta que hay tanta ambición y necesidad de subir que haber estado ocho jornadas en blanco se puso cuesta arriba: “Llevábamos una semanas tensas porque vivimos de ganar y la situación era extrema, ya que no nos lo podemos permitir. Se trabaja un poco mejor, pero es que no significa nada; quedan once partidos nada más y se tiene que seguir apretando al máximo”. Y vuelve a repetir que el Almería, incluso si se da una derrota en Burgos, no quedaría atrás en la carrera por las dos primeras plazas: “Para mí aún no estamos descartados para el ascenso directo. Hay que ir semana a semana y si la barrera es 73, 74 puntos seguirías teniendo posibilidades. No cambiaría el discurso incluso si por lo que sea perdiéramos en Burgos”.

Distancias

Nadie sabe dónde están los puntos. Mirar el calendario a largo plazo no es bueno y Rubi confirma que, tras vivir lo del Alcorcón hace casi tres años que le apagó la fiesta del ascenso en el Mediterráneo, todavía se pueden dar algunas sorpresas como que los de arriba se dejen puntos con rivales prácticamente descendidos: “En Segunda no hay diferencias como en Primera. No hay tanta distancia entre los de arriba y los de abajo. Quizá algunos tengan un poco más pero si no van al máximo se esfuma. Los jugadores son conscientes de que el Burgos nos va a querer meter en el área”.

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