Carlos González y Jesús León, condenados a 4 años de cárcel cada uno por el ‘Caso Chalet’

Córdoba

La sección tercera de la Audiencia Provincial de Córdoba ha condenado al que fuera expresidente del Córdoba Club de Fútbol (CCF), Carlos González, por haber utilizado fondos del equipo para abonar unas obras de reforma de su vivienda particular. En concreto, un chalet en el acaudalado barrio de La Moraleja, en Alcobendas (Madrid).

Ambos son culpables del delito de administración desleal a penas de cuatro años de prisión cada uno, así como a multa de doce meses con una cuota diaria de quince euros. Además, se les condena a indemnizar conjuntamente al Córdoba Club de Fútbol Sociedad Anónima Deportiva (SAD) por 1,2 millones de euros. Eso sí, el Tribunal les exculpa de los delitos societarios que se le imputaban, lo cual exonera de toda responsabilidad a la que fuera presidenta de la Fundación CCF y esposa de Jesús León, Isabel Madueño.

La sentencia, adelantada por Diario Córdoba y a la que ha tenido acceso la Cadena SER, considera probado que González y León diseñaron "un plan perfectamente establecido para ocultar el abono de las obras de reforma del chalet" bajo facturas que tenían como concepto la adquisición de material para la construcción de la Ciudad Deportiva de la Fundación Córdoba Club de Fútbol, una instalación que nunca se construyó.

Tanto las obras de la vivienda como la misión de levantar la instalación del equipo estaban asignadas a la constructora GRUCAL Infraestructuras, propiedad de Jesús León, que posteriormente se convertiría en presidente del CCF. De la cuentas del Córdoba Club de Fútbol Sociedad Anónima Deportiva, bajo la dirección de Carlos González, salieron 1.224.294 euros hasta en ocho transferencias bancarias realizadas en favor de la constructora de León.

Todas ellas tenían como concepto 'Obra: Ciudad Deportiva Córdoba Club de Fúbtol', según la sentencia, "para dar verosimilitud". Y es que las cantidades económicas entregadas para este fin son coincidentes con las que aparecían en las certificaciones de obra de la casa de González. Una de ellas, de 87.884 euros era incluso idéntica. Para la Guardia Civil, que asumió la investigación del caso, "este hecho no dejaba ninguna duda de que la reforma del chalet se hizo con fondos del Córdoba bajo transferencias enmascaradas", según declararon algunos de los agentes intervinientes en el juicio oral.

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Las defensas de León, González y Madueño habían solicitado la nulidad del procedimiento, aludiendo a que los hechos enjuiciados habían prescrito. Sin embargo, el Tribunal ha desestimado esta petición, pues el valor de lo defraudado supera los 250.000 euros, por lo que el plazo de prescripción del delito de administración desleal se amplía hasta los diez años. Tampoco considera la Sala prescrito el delito societario, ni concede a las defensas la inadmisión de los mensajes de Telegram o e-mail intervenidos por la Guardia Civil tras los registros realizados en las sedes del Córdoba, su Fundación o el domicilio de Jesús León.

La sentencia tampoco satisface por completo las expectativas del Ministerio Fiscal, por no ser condenatoria respecto al delito societario. Con todo, las partes cuentan con diez días hábiles para recurrir ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.