No abandonemos el Polígono Sur
El subdirector de Diario de Sevilla, Carlos Navarro Antolín, reflexiona sobre los cambios en las líneas de Tussam para sortear las zonas conflictivas de algunos de los barrios más pobres de España
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Carlos Navarro Antolín: No abandonemos el Polígono Sur
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Sevilla
Hay dos líneas de Tussam que modifican sus recorridos y una que directamente lo suprime para evitar zonas de alto riesgo del Polígono Sur, como han denunciado varios colectivos. Las Letanías, Martínez Montañés, Murillo… La ciudad se aleja de estos barrios cuando los servicios públicos dan un paso atrás. Hay oficinas de organismos públicos que ya se han marchado cuando se exige justamente lo contrario. Nos quejamos de que el Estado se repliega en Cataluña. ¿Y no lo hacen las Administraciones de los barrios más pobres de España que precisamente están en Sevilla?
Hay profesionales autónomos que no acuden a prestar sus servicios en ciertas calles. No quieren asumir riesgos. La luz de muchas casas donde vive gente honrada y trabajadora se corta una y otra vez por la sobrecarga de las plantaciones ilegales de marihuana.
Si les dejamos sin luz, si les privamos de algo tan básico como el autobús urbano, si los condenamos a vivir episodios violentos más propios de una guerra… Estamos cerrando la puerta a la esperanza a cientos de sevillanos, privándoles del derecho a una vida cotidiana digna. Dirán con razón que la ciudad considera que el Polígono Sur es un gueto, que Sevilla ha asumido que toda gran capital tiene suburbios y sus autoridades prefieren encogerse de hombros.
Si no somos capaces de garantizar el servicio de transporte público es que hemos fracasado con estrépito. Y habremos abandonado, otra vez, a los vecinos del Polígono Sur mientras meditamos cómo regular el turismo masivo, captar más viajeros chinos o limitar las terrazas de veladores.