Sin Suárez costará el doble
El Almería se juega el bigote
El portero del Huesca y la falta de Luis Suárez frenan al Almería. / Juan Sánchez
Almería
LA OPINIÓN DEL PARTIDO: Escuchando la rueda de prensa del entrenador del Almería con esos datos sobre remates a portería y piropos al portero del Huesca lo tengo claro: sin Suárez no hay gol y no existe un plan B. Mucho verbo y elogios a todo trapo para ir a la conclusión final: Almería 0 Huesca 0. No hubo gol y ocasiones las de cada partido o más pero sin Luis Suárez no hay fantasía y se apagan las bombillas porque el colombiano los hace mejores a todos. Tenía ganas de verlo y comprobarlo. No hay recambio para el Pichichi con Baptistao. Tampoco llega con Lázaro y Milovanovic y Rachad no estaban. Al final todo iba a terminar sin goles porque el Huesca ni lo intentó y era feliz con el empate.
Cuando un entrenador sube a los altares al portero rival y lanza una tanda de elogios para los que jugaron: algo tapa. Todos tenemos claro que el punto es bueno y que lo intentaron todo para marcar pero hay mucha distancia entre Luis Suárez y lo que meta Rubi en el campo. Eso hay que tenerlo muy claro porque sin la estrella el Almería se atasca y no convierte. Pudo ser peor porque si llega a meter la única que tuvo el Huesca el Almería hubiese perdido. Hay que ser realistas. No hay recambio para Luis Suárez y el Almería se juega el bigote como pierda a su hombre gol.
Un autobús
El partido fue un monólogo del Almería que controló el juego y tuvo la pelota gestionándola bien en el campo rival con Maximiano de testigo pero sin participar. El mejor del Huesca fue su portero que hizo paradones pero con Luis Suárez una hubiese entrado: seguro. Ya tenemos claro que si no juega Luis Suárez el Almería es peor porque sus compañeros son mejores con él en el campo. Se juega mucho el Almería con los goles del colombiano que le llevarán a Primera pero se juega el bigote como se lesione o paguen su cláusula. El Huesca puso el autobús en el campo y se llevaba lo que quería mientras el Almería con Baptistao enchufado y Lázaro despistado no era capaz de hacer gol.
Un avión sin piloto
Tiene toda la razón en las estadísticas del ataque del Almería su entrenador porque el Almería era un avión en el campo pero le faltaba el piloto para hacerlo ganar. Ocasiones las hubo pero no estaba el Pichichi y el mensajes es claro en el sentido de ser fundamental para subir como se hace necesario articular un plan B con un recambio que se acerque a lo que ofrece Suárez que no lo tiene en plantilla Rubi y tampoco se contempla comprarlo en el mercado de invierno. El autobús del Huesca se llevó el mismo premio que el avión del Almería. Cosas del fútbol.
Un portero automático
El mejor del Huesca fue su portero Dani Giménez que no es nuevo que haga esos paradones porque ya es experto y sabe colocarse en el momento preciso. Tuvo mucha culpa del punto conseguido por el Huesca y el solo se bastó para frustrar todos los intentos de gol de un Almería que jugó bien defendiendo su parcela y atacando como hay que hacerlo. Todo salió según lo tenía previsto el entrenador del Almería pero nadie contó con las intervenciones del portero del Huesca y del gran trabajo de sus compañeros en defensa.
Dice Rubi que tenemos un punto más pero sin Luis Suárez no es lo mismo.
