Hay partido

La designación de María Jesús Montero como candidata a liderar el PSOE andaluz es una buena noticia. Se mire por donde se mire. Un partido que ha gobernado casi 37 años Andalucía no podía seguir inmutable tras cada revés electoral, impávido a la espera de volver a ser arrasado en las autonómicas del año que viene. Inmóvil pese a haber sufrido una falta de liderazgo, de confianza y, sobre todo, de capacidad de ilusionar.

Madrid elige al perfil que suscita más consenso y respaldo. Acierta porque designa a una mujer fuerte, de gestión, con capacidad de negociación, que cohesiona, que conoce la Junta de cabo a rabo y que ha dirigido tanto la hacienda andaluza como el SAS cuando la sanidad pública no era un problema para los andaluces.

Es verdad que el PSOE arriesga a una ministra de Hacienda y vicepresidenta primera del Gobierno para presentar en Andalucía un modelo alternativo al del presidente Juanma Moreno, pero me quedo con que en esta operación gana el PSOE andaluz porque por fin se rearma; gana la ciudadanía porque una alternativa sólida al presidente andaluz es la que azuza al gobierno de la Junta, que desde ahora deberá estar bastante más alerta; y gana Andalucía porque será el territorio en el que compitan y hagan política el presidente autonómico y barón del PP mejor valorado y la política progresista más fuerte del país.

Ya veremos quién gana en 2026, pero una cosa está clara: Con María Jesús Montero, sí hay partido.