Pillan a una camarera echando lejía en los postres tras enterarse de que no iba a ser renovada en un hotel de Málaga

Una mujer ha sido acusada de echar lejía a la comida en un hotel de Málaga. Así lo ha informado el diario 'Sur', que también ha añadido que la Fiscalía de la provincia ya ha solicitado una pena de tres años de cárcel por el delito cometido.

Los hechos tuvieron lugar cuando dos clientas del hotel aseguraron haber visto a la mujer, de 50 años y sin antecedentes penales, vertiendo un líquido de tono amarillento en los postres que se encontraban en la vitrina. Según comentaron, el fluido, posteriormente identificado como lejía, alcanzó los yogures, y las rodajas de piña y sandía que estaban expuestas.

Según las pesquisas de la Policía Nacional, la mujer se habría enterado de que no iba a ser renovada tras su último día en el trabajo, por lo que habría actuado a modo de venganza, para repercutir en la imagen del centro hotelero. Así se ha desprendido de la investigación policial, que ha agregado que la mujer tenía intención de "causar un grave perjuicio al establecimiento mediante una intoxicación alimentaria".

Los hechos tuvieron lugar durante la hora del buffet libre en el centro hotelero

Este suceso ocurrió sobre las 20:50 horas del 31 de mayo de 2023, durante la hora de cenas en el alojamiento, que tiene la modalidad de buffet libre. Las dos clientas se encontraban en el salón cuando sorprendieron a la acusada echando la lejía y saliendo del lugar mientras empujaba un carrito de la limpieza.

Estas dos mujeres, entonces, avisaron al gerente del salón, que a su vez alertó a la directora del hotel de lo que estaba sucediendo y fue entonces cuando las autoridades fueron notificadas. Al llegar, según ha relatado el citado medio, comprobaron que, efectivamente, el líquido vertido sobre los postres coincidía con el producto para lavavajillas que usaba el hotel.

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La mujer, de la que aún no han trascendido más datos, está acusada de un delito contra la salud pública, por "envenenar o adulterar con sustancias infecciosas u otras que puedan ser gravemente nocivas» para la salud, sustancias alimenticias destinadas al «uso público o al consumo de una colectividad de personas», según se ha podido leer en el escrito de la acusación.

La acusada, aun así, sigue negando los hechos y asegurando que ella no vertió lejía sobre los postres. "¿Cómo voy a envenenar a unos niños?", se ha cuestionado. Por el momento, no hay una fecha concreta, aunque lo que sí se sabe es que próximamente tendrá que enfrentarse al juicio por el delito presuntamente cometido.