Iván Alejo se marcha cedido al Apoel de Nicosia
El vallisoletano se marcha después de casi 200 partidos en en el conjunto amarillo.
Iván Alejo en una disputa de balón frente al Eldense. Foto: Cádiz CF.
Llega el final de año y el comienzo, en pocos días, del mercado de fichajes de invierno. Por ello, desde la entidad amarilla ya se están trabajando en varias llegadas y salidas que tienen que ir dándose en este mes de enero en la entidad. Con la vuelta a los entrenamientos del próximo día 30 de diciembre, habrá caras nuevas -como la de Iker Recio-, y caras que posiblemente ya no estén. En la mañana de hoy martes, Iván Alejo se ha convertido en nuevo jugador del Apoel de Nicosia.
Hace unos días, salía a la luz desde Chipre que el Apoel de Nicosia, conjunto que dirige Manolo Jiménez, ponía sus ojos en Iván Alejo. Por ello, en un ciclo que parecía haber acabado en verano y que finalizó con una renovación hasta 2028 para diferir su contrato, el vallisoletano no veía con malos ojos recalar en el conjunto chipriota. Siendo así, el jugador -que estaba en Manchester- llegó el sábado a Chipre y no se reincorporó ayer ya a los entrenamientos del conjunto gaditano.
Renovando este mismo verano, el periplo de Iván Alejo en la entidad gaditana podría haber llegado a su fin. Después de seis temporadas en el conjunto amarillo, el extremo acabaría su camino en Cádiz tras 163 partidos en la Tacita de Plata, cuatro goles y 13 asistencias.
Un mensaje de despedida
El vallisoletano se ha despedido con un mensaje en redes del club y también de la afición. "Y por último gracias AFICIÓN. A los que me aplaudisteis día sí y día también aún sin muchas veces merecerlo. Siempre he sentido vuestro cariño. Sé que muchas veces no estuve a la altura en mis comportamientos, así que por eso os pido PERDÓN. Gracias por cada aliento, cada aplauso y cada ovación. Es algo que tanto mi familia como ya nos llevamos para siempre. Sois el motor del Cádiz, y volveréis a llevar en volandas al club hacia primera división. Estoy convencido de que esto no es un adiós, es un hasta luego. Por que uno siempre vuelve donde fue feliz... y yo en Cádiz he sido la persona más afortunada y más feliz del mundo. Suerte en el futuro. Nos vemos pronto. De un gaditano de adopción”.
