Verbenas
Firma de Opinión del presidente de la Federación de Peñas Cordobesas, Juan Serrano
Córdoba
Llevamos años en esta ciudad, lamentándonos que habían desaparecido las verbenas populares de nuestros barrios. Aquellas que en los ochenta y noventa poblaban casi todos ellos.
La burocracia había ido minando la voluntad y la capacidad de las asociaciones, peñas y cofradías de emprender la tarea.
Años más tarde, la voluntad de un concejal y su equipo de hacer regresar esta bonita tradición a la calle y darle dinamismo tanto a las asociaciones como a los barrios, que poco a poco estaban perdiendo y que dejaban sin alma las calles, convirtiéndolas en zona de paso de ciudadanos que miramos la pantalla antes que a la cara de los que convivimos la zona, se lanza la propuesta de traer más verbenas como antaño, dando apoyo logístico más que monetario es verdad, pero que animaba a volver a la tradicional verbena.
Hechos lamentables y esperados por otra parte, en algunas zonas o verbenas y el consecuente rechazo del vecindario, habitual y razonable, hace que desde el ayuntamiento se publique que dejará de celebrarse verbenas en el centro y casco histórico, es decir, si exceptuamos a la periferia, estamos hablando de media ciudad. Posteriormente nos anuncian que se estudiará.
Las verbenas, como otras celebraciones de la ciudad, deben tener un estudio minucioso, tranquilo y consensuado entre todos los implicados y no limitarnos a prohibir ante la primera crítica.
Sentémonos todos a la misma mesa, hablemos, veamos cual y donde está el problema y solucionemos dicho problema en lugar de prohibir a la celebración en torno al cual se efectúa.
No nos podemos limitar a aquello de: muerto el perro, se acabó la rabia.
Eliminar verbenas para que no se haga botellón alrededor de ella y queramos con prohibiciones solucionar problemas de educación y civismo es querer matar moscas a cañonazos.
Juan Serrano
Presidente de la Federación de Peñas Cordobesas.