Tractorada en Lopera contra las megaplantas fotovoltaicas en el municipio
Así lo han decidido los agricultores de esta localidad jiennense, que marcharán en una tractorada el próximo jueves 26 de septiembre al creer que pondrían en riesgo la economía de la zona
Una planta fotovoltaica vista desde las alturas. / Yaorusheng
Jaén
Tractorada en Lopera contra las megaplantas fotovoltaicas en el municipio. Así lo han decidido los agricultores de esta localidad jiennense, que marcharán en una tractorada el próximo jueves 26 de septiembre al creer que pondrían en riesgo la economía de la zona que vive fundamentalmente de la agricultura. Y no es la primera vez que se movilizan, ya que el pasado 24 de agosto ya realizaron una concentración para mostrar su rechazo al proyecto de Greenalia.
El objetivo, en palabras de la plataforma creada al efecto, es el cese de expropiación de tierras y el abandono de estos panes de instalación de la megaplanta fotovoltaica en Lopera. La protesta está convocada el jueves a las 17,30 horas partiendo desde el polígono del municipio, contará con la participación de tractores y se dirigirá hacia las tierras afectadas.
Según asegura el Ayuntamiento de Lopera en un comunicado, "aunque los agricultores loperanos están a favor de la energía verde, subrayan que esta debe implementarse sin perjudicar a terceros ni al medioambiente. Denuncian que Greenalia pretende utilizar agua del río Guadalquivir para sus operaciones, lo que agravaría la situación y afectaría a otros agricultores de la comarca. Los agricultores insisten en su mensaje: renovables sí, pero no así".
Estos agricultores han creado la Plataforma Campiña Norte contra las Megaplantas Solares para luchar contra una "amenaza a su modo de vida y futuro. La instalación de estas megaplantas no solo no generará empleo, sino que contribuirá activamente a la destrucción de puestos de trabajo locales. Lopera, un pueblo con una fuerte tradición agrícola, se vería afectado de manera directa, especialmente en lo que respecta a la recolección de aceitunas, un sector clave para la economía y el sustento de muchas familias. La pérdida de decenas de hectáreas de tierra fértil y miles de olivos haría que los vecinos y vecinas tengan más dificultades para acceder a los jornales necesarios para obtener el subsidio agrario (PER), agravando aún más la situación económica de la comunidad".
Por último, con una preocupante “falta de transparencia” de los promotores, se muestran preocupados “por la estrategia de fragmentación de proyectos para eludir controles de las administraciones. Los promotores de las plantas solares están dividiendo los proyectos en instalaciones más pequeñas con el fin de evitar los controles administrativos más rigurosos en lo que entiende como un claro fraude de ley".
