Cádiz como ciudad de ciudades, sede del trofeo de los trofeos. El Trofeo Carranza y la tacita de plata, un binomio indisoluble que tiene detrás 70 años de historia que ha recorrido con todo lujo de detalle el periodista Antonio Hernández-Rodicio, que ha ofrecido un pregón al que no ha asistido nadie del Cádiz C.F. en representación del club. El periodista gaditano ha comenzado su recorrido en el Cádiz de 1955 dando muestra del vasto conocimiento que atesora sobre cada calle, cada rincón, cada establecimiento y cada nombre que ha tenido que ver en la idiosincrasia de la ciudad. Desde el puerto hasta el estadio, desde una taberna hasta el mar, con la semana santa y, por supuesto, el fútbol, Hernández-Rodicio ha mostrado a los presentes una completa fotografía de la historia de la capital gaditana. Desde los niños corriendo detrás del autobús del Palmeiras, el trasiego de los bocadillos, las tandas de penaltis o el escaparate de Moral, el pregonero ha trufado su discurso de referencias tan gaditanas como concretas de los pequeños y grandes nombres del Cádiz de hace 70 años y de sus personajes. Su faceta como periodista ha quedado plasmada en la cantidad de datos que ha ofrecido para contextualizar al público en aquella ciudad de hace décadas, donde las Puertas de Tierra «aún eran defensivas» y no había «ni uno ni dos puentes». «Cádiz, ciudad de los pesares más que de los placeres», ha mencionado en algún momento de su pregón el autor, que a continuación ha recordado cómo la ciudad de entonces veía nacer la Cepa Gallega, no sin antes repasar su relación con el puerto y el mar. Las casetas de playa y las carreras de caballos, las fronteras de aquel Cádiz, los carteles publicitarios y los primeros turistas que llegaban; Hernández-Rodicio se ha detenido en las esquinas del pasado mientras los asistentes atendían en silencio, como acompañándole en ese viaje mientras los más jóvenes se la imaginaban y los más veteranos recordaban esa ciudad que tanto ha cambiado. Un pregón con el que ha dado testimonio de la historia de la capital gaditana desde el origen del trofeo de los trofeos hasta la actualidad, donde se ha detenido para describir, desde el análisis, los tiempos que corren y el olor del estadio. Antonio Yélamo, periodista y director de la Cadena SER Andalucía, ha sido el encargado de presentar a Antonio Hernández-Rodicio, colega de profesión con quien tantas horas ha compartido en ese mismo salón de plenos que hoy ha sido escenario del pregón. Yélamo ha prometido ser sincero y contar «toda la verdad» sobre su amigo, de quien ha repasado sus facetas profesionales, su papel como padre y como marido pero también como amigo y promotor de otra cita ineludible del verano gaditano: la velada de LA guayabera. Aunque por encima de todo, el periodista ha destacado el compromiso de Hernández Rodicio con su ciudad, con Cádiz. «Un compromiso permanente, por derecho». El alcalde de Cádiz, Bruno García, también ha ofrecido unas palabras a los asistentes agradeciendo a Antonio Hernández-Rodicio «su brillante pregón» y recordando que «el trofeo forma parte de la entidad de los gaditanos, que lo sienten como un símbolo».