María Gámez, ex directora de la Guardia Civil: "El daño no tendrá jamás reparación. Sería deseable una reflexión colectiva para evitarlo"

Málaga

"El 22 de Marzo de 2023, hace más de un año, presenté mi dimisión como Directora General de la Guardia Civil tras conocer que mi marido había sido imputado en una causa judicial. A pesar de confiar plenamente en la rectitud de su comportamiento y en su inocencia, y a pesar también de que la causa no guardaba relación alguna con mi actividad ni con mis responsabilidades políticas, tomé aquella decisión para no perjudicar a mi familia ni a la propia Institución de la Guardia Civil, y también con ello al Gobierno de España. Era consciente de que mantenerme en el cargo en esas circunstancias sería utilizado en contra de todos ellos. 15 meses después de esa imputación, la justicia ha dicho que no hay nada y ha acordado el archivo de la causa. Es más, se ha anulado la providencia por la que se le declaró imputado; es decir, que nunca se le debió imputar". Son las primeras palabras de María Gámez tras conocerse el archivo del caso que le llevó a dejar su cargo hace más un año. Gámez ha volcado sus sentimientos y opiniones en su cuenta particular de una red social para reclamar, a la sociedad, una reflexión colectivo ante lo ocurrido y que suele repetir con demasiada frecuencia, en el ámbito político.

"Me he tomado un tiempo de reflexión antes de escribir estas líneas, porque lamentablemente esta 'práctica' u otras parecidas, se han usado antes que conmigo, con otras personas del ámbito político, y muy especialmente con compañeros de mi partido con los que compartí parte de mi vida política, en Andalucía, y que han sufrido mayor escarnio que lo que a mí me ha pasado, para sonrojo de aquellos que creen en la democracia. Es lamentable que no parezca posible nada más que hacer que contemplar este escenario, atónitos, frente a todo lo que está pasando. También parece que va a seguir ocurriendo, si nada ni nadie lo impide. Pero ese tiempo de silencio por mi parte necesita cerrarse con estas mis letras, porque creo que debo contribuir a ponerlo de relieve, expresarme en primera persona, y cerrar para mí y para los míos un capítulo muy doloroso", asegura la ex directora del Instituto Armado.

Primera mujer al frente del Instituto Armado

"Como es fácilmente imaginable, el daño que todo esto ha conllevado en el plano personal, familiar, reputacional y profesional, a mi marido y a mí, y a nuestros hijos, no tendrá jamás reparación posible. Esa imputación, ahora anulada y archivada, me obligó a dimitir y abandonar mi trayectoria política de la que me siento muy orgullosa. A pesar de todo lo que ha pasado, mantengo que era mi deber dimitir de mi cargo y hacerlo en ese momento y forma. Me entristece profundamente que el ejercicio de la política, y lamentablemente más cuando la ejerce una mujer, y teniendo en cuenta que lo ejercía como primera mujer en el cargo en la historia de la Guardia Civil, tenga que conllevar tan elevado coste a partir de la imputación de un familiar, ahora anulada", lamenta Gámez durante su reflexión.

"Mala fe"

"Sabemos que, por desgracia esta información que cierra por fin este penoso episodio, no tiene ni tendrá la relevancia ni el espacio en los medios de comunicación que tuvieron las noticias que se publicaron a raíz de la imputación que nunca debió producirse. También nos tememos de antemano que quienes difundieron informaciones falsas y quienes despreciaron por completo la presunción de inocencia que merece cualquier persona, ni rectificarán ni se desdecirán jamás. Lamentablemente hemos conocido otros casos parecidos en los que la falta de profesionalidad y la mala fe se han cebado con personas que siempre han querido ejercer la política honestamente. Quiero dejar claro que afortunadamente tuve el apoyo moral y expreso de muchos de mis compañeros y compañeras en el Ministerio, en el Gobierno, y en la Guardia Civil; algo de lo que me sentiré siempre profundamente agradecida. Pero aún más estoy orgullosa del apoyo y la fortaleza de mi familia y amigos. Gracias también a mujeres que me han demostrado sin apenas conocerme, lo que significa, de verdad, la sororidad", añade Gámez que termina extiendo su análisis personal reclamando una seria reflexión colectiva: "para la calidad democrática de un país, y para que nadie tema que el ejercicio de la política pueda acabar con experiencias tan injustas como la que mi familia ha padecido, y la que han soportado otros responsables políticos, sería deseable que todos hiciéramos una seria reflexión colectiva a este respecto, y exploremos cómo evitarlo. Nos va la democracia en ello".

Un año después de su dimisión

Gámez renunció a su cargo en marzo de 2023 tras conocer que su marido había sido "citado en el marco de un procedimiento judicial". Las investigaciones que afectaban a su marido versaban sobre adjudicaciones de la Junta de Andalucía, por un posible delito de desvío de fondos públicos que ahora ya han quedado completamente archivadas. "Es una decisión difícil pero la única posible para alcanzar dos objetivos que son irrenunciables, proteger a mi familia y proteger a la Guardia Civil". "Sin entrar en el derecho a la presunción de inocencia que tienen todas las personas, también mi marido, tomo esta decisión por principios y honestidad" aseguró aquel día Gámez durante la presentación de su dimisión.

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Reacciones

La publicación de estas palabras de Gámez han provocado la reacción de dirigentes políticos como el secretario general del PSOE en la provincia de Málaga, Dan Pérez, que ha compartido la reflexión de la ex directora general.