Dos Europas en una semana

Buenas tardes José Manuel, buenas tardes a todos. Esta semana que hoy termina, comenzaba el lunes con una imagen de miedo, de temor al oscurantismo de esas ideologías que sumieron a Europa y una gran parte del planeta en el horror y la guerra hace algo más de 80 años. El resultado de las elecciones europeas, dejando la euro cámara más o menos como estaba, marca sin embargo un avance de mensajes ultranacionalistas en algunos casos; en otros, simplemente, de una estupidez y superficialidad incontestables. Es la imagen de una Europa vieja, aunque algunos de los candidatos sean jóvenes, pero sobre todo muy cansada de sí misma y desilusionada.

Por eso me alegré de ver que las portadas de la prensa local este jueves le daban protagonismo a rostros jóvenes e ilusionados, el antónimo visual de lo visto el lunes. Son chicos y chicas que, además de por su juventud, ocupaban ese espacio por mérito propio: son los mejores de Córdoba en la denominada EBAU que yo nunca dejaré de llamar selectividad. De los cinco mejores dos son chicos y tres chicas. Tres de los cinco, incluido Miguel Ángel con la mejor nota de Córdoba, estudiaron en institutos públicos de barrios populares. Algunos de ellos saldrán de la ciudad ya a finales de verano para estudiar en otros lugares. Les deseo suerte y que tengan la oportunidad de regresar, si así lo quieren. Su éxito académico y profesional no será sólo beneficioso para ellos. Igual que ellos cientos de miles de jóvenes europeos se encuentran en el mismo momento de sus vidas. Enriquecerán los lugares en los que residan con su talento, su formación y su constancia. Enriquecerán la Europa que los vio nacer y la mejorarán; todo lo contrario de muchos de los que ocuparon las portadas del lunes, que solo traen consigo miedo y odio. Si hay algo por lo que mirar hacia el futuro con cierto optimismo son Miguel Ángel y sus colegas.

Que tengan un feliz verano.