A un paso del ascenso a LEB Oro

Morón de la Frontera

El CB Starlabs Morón sigue escribiendo páginas de su sueño de Oro. Lo hace con pulso firme, buena letra y con la pericia del mejor guionista, capaz de crear una trama que enganche al espectador hasta el último segundo con un espectáculo lleno de colorido, fantasía y buen baloncesto. En su último partido de la temporada en casa, el primero de la final de la fase de ascenso a LEB Oro, los de José Santaella vencieron al CB Sant Antoni por 74-65. Nueve puntos de ventaja para afrontar el partido definitivo el próximo sábado en Ibiza. Visto a cómo se cotiza el punto, Morón tiene un buen botín.

Lo logró tras jugar un partido muy serio, sin dejar respirar al equipo visitante, que tenía superioridad en el interior, pero que apenas podía capear el vendaval ofensivo de los perros de presa de naranja. Soberbio partido, una vez más, de Javi Marín, el que probablemente es el mejor base de la categoría, y que puede gozar de muchos minutos para cargar las pilas gracias al enorme trabajo de Rafa Santos, que también firmó un partido para confirmar lo que se espera de esta gran promesa del basket español.

Otro que está cuajando una fase de ascenso de altísimo nivel es Lío Kouadio, que volvió a ser el MVP del Morón gracias a sus 20 puntos, siendo una pesadilla constante para los de Sant Antoni. Fueron estos los nombres destacados de un equipo en el que todos sumaron, una unidad compacta y solidaria que llegó a ponerse con una ventaja de 17 puntos. Dos técnicas muy discutidas de los árbitros ayudaron a enchufar al equipo visitante, que también se vio beneficiado de la falta de acierto local en los últimos minutos, para dejar la eliminatoria abierta, aunque con esa ventaja para Morón.

Es significativo, y dice mucho del respeto que se le tiene a este equipo, el cómo acabó el Sant Antoni el partido: celebrando haber perdido «solo» de nueve puntos. Santaella habló de ese respeto, y es algo que no se puede reprochar a ninguno de los equipos que han venido a una cancha en la que solo se han cedido dos victorias: una contra el imparable Zamora, y otra contra Huesca, tras quedarse Morón sin pívots por lesiones. Ha sido una fiesta absoluta el Pabellón Alameda en esta temporada, y fiesta hubo en la grada y en los aledaños antes, durante y después del partido. Un ambiente festivo que ahora está en modo reposo, porque se espera un gran desplazamiento a Sant Antoni el próximo sábado para presenciar el final de esta temporada.