La nieta del Capitán Tarazona pide al Ayuntamiento de Córdoba una placa para el militar en el Cuartel del Marrubial

Córdoba

"Soy Sol Rodriguez Tarazona, nieta del capitán Manuel Tarazona Anaya". Así comienza la carta que Sol Rodríguez Tarazona ha remitido al alcalde de Córdoba, José María Bellido, a los portavoces de todos los grupos municipales del Ayuntamiento de Córdoba, a la Federación de Asociaciones de Vecinos, al Consejo del Movimiento Ciudadano y a la Fundación Prolibertas, que gestionará las futura Casa de la Solidaridad del Cuartel del Marrubial.

En ese escrito, Rodríguez Tarazona, explica "el profundo amor por Córdoba de su abuelo, hasta el punto de estar dispuesta a dar la vida por la ciudad, como se demostró aquel fatídico 13 de agosto de 1936, cuando fue fusilado en el patio del Cuartel del Marrubial, por defender la legalidad vigente. A mi abuelo lo habían matado a los 35 años por defender a la población de Córdoba. Había dado su vida por la ciudad", relata la misiva, que recuerda cómo el destino de su familia se vió truncado por aquellos acontecimientos: "Seguramente imagina que ese hecho cambió nuestra vida para siempre. Hasta el punto de que nuestra abuela tuvo que tomar la decisión de salir de Córdoba y de España para protegerse y protegernos. Ese exilio nos llevó a París desde donde hoy le escribo".

En su exposición de motivos, Sol Rodríguez transmite en esa carta a sus destinatarios, cómo la vida de su familia cambió por esos hechos y la importancia que tendría para ellos que se reconociera la figura de su abuelo con la colocación de una placa o un memorial que recuerde estos hechos en el cuartel de El Marrubial.

"Como podrá imaginar a estas alturas hay pocas cosas que puedan reparar el daño sufrido por mi familia, tras unos hechos que jamás vamos a poder olvidar", escribe la nieta de Tarazona.

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"Sin embargo ahora que se rehabilita el Cuartel del Marrubial para convertirlo en Casa de la Solidaridad, me dirijo a usted para pedirle que considere la colocación en ese lugar, de una placa o memorial alusivo a la memoria de mi abuelo. Para nosotros. Para su familia será de una importancia máxima pues serviría para amortiguar su ausencia y para reparar el daño", concluye.