Narsil ha sido la tercera hembra de lince que ha dado a luz esta temporada en el centro de cría de El Acebuche en el Parque Nacional de Doñana (Almonte, Huelva), después de que el pasado martes, 12 de marzo, nacieran sus tres cachorros. Así, se suma a Sardina y a Kolia, que alumbraron el pasado 28 de febrero y 29 de febrero, respectivamente. Así lo ha indicado el Organismo Autónomo de Parques Nacionales (OAPN) en sus perfiles de redes sociales, en el que ha destacado que ya ha habido dos partos más este año y que «pronto se esperan dos más». En este sentido, según la fecha de la primera cópula, la hembra Parra debería parir este mismo sábado, mientras que el de Macadamia se espera para el día 19 de marzo y el de Oleander, para el 20 de este mes. La lince Sardina -nacida en este mismo centro de cría hace tres años y la primera en copular esta temporada-, dio a luz a tres cachorros, aunque finalmente solo uno sobrevivió al parto. Además, la hembra Kolia -que tiene once años y cuenta ya con 14 descendientes- también dio a luz a otros dos cachorros. De este modo, con los tres de Narsil ya son seis los linces nacidos -y que han sobrevivido- esta temporada. Un número que aumentará en los próximos días con los alumbramientos programados. Además, con estas crías, ya son 225 los cachorros de lince ibérico nacidos en el Centro de cría de El Acebuche desde que en el año 2005 naciera aquí la primera camada del programa de cría en cautividad. La nueva temporada reproductora 2024 del lince ibérico arrancó en el centro de cría en cautividad de El Acebuche con el emparejamiento de siete parejas en base al objetivo principal de gestionar adecuadamente la diversidad genética de esta especie tan amenazada. Así, de las siete parejas establecidas, entre el 28 de febrero y el 21 de enero habían entrado en celo y copulado seis de ellas. De este modo, de las siete parejas establecidas según las prioridades genéticas se encuentran dos hembras que no habían criado previamente ninguna camada como son Sardina y Oleander, y cuatro hembras experimentadas: Narsil, Kolia, Parra y Juromenha, y una hembra, Macadamia, que en la temporada de cría de 2023 se consiguió por primera vez su reproducción exitosa tras varios años de fracaso reproductivo. Desde el organismo han explicado que el lince ibérico es una especie «muy estacional» y «solo muestra un celo al año», que tiene lugar generalmente en las primeras semanas del invierno. A partir de ahí, y con una gestación de 63-66 días, se esperan que nazcan las diferentes camadas que continuarán contribuyendo a la recuperación de esta especie. El centro de cría de El Acebuche está gestionado por el Organismo Autónomo Parques Nacionales del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, quien también lleva la gestión del centro de cría de Zarza de Granadilla, en Cáceres, donde también se han establecido siete parejas reproductoras. En 2023 salieron adelante un total de 13 crías de lince -de las 17 gestadas- en el Centro de Cría del Lince Ibérico de El Acebuche, en Doñana (Huelva), seis más que en 2022 -salieron adelante siete-, y supone el dato más alto tras los años 2008 y 2011, cuando también salieron adelante 13 cachorros, según indican los datos publicados por el Organismo Autónomo de Parques Nacionales (OAPN). La pasada temporada fueron 14 las parejas las que se seleccionaron para la cópula en los centros de El Acebuche y Zarza de Granadilla (Cáceres) y, entre ambos centros, han salido adelante un total de 20 cachorros de lince ibérico. El 71% de las hembras quedaron gestantes tras el celo y solo dos hembras, Nota en El Acebuche y Juno en Zarza de Granadilla, no han gestado este año ninguna camada.