A vueltas con el campo
La firma de Lidia Menacho en Hoy por hoy Jerez
Jerez de la Frontera
Recuerdo, cuando de pequeña veníamos a Andalucía de vacaciones, contemplar con miedo las vacas de mi abuelo. A pesar de vivir mi infancia en un pueblo pequeño de La Mancha no tenía un contacto directo con nuestro sector primario.
Mis abuelos murieron a una temprana edad, cuando yo era una niña, y aquello que el antiguo Instituto Nacional de Colonización les otorgó cuando eran un joven matrimonio, paso a manos de mi tío que seguía manteniendo el oficio.
No recuerdo si antes o poco después de su defunción, las vacas también se fueron. No recuerdo si coincidió o no con la desaparición de La Merced, cooperativa jerezana ganadera, pero ambos hechos estaban íntimamente relacionados.
No ha sido una muerte rápida, ni silenciosa, ni previsible. Cada aprobación y reforma de la Política Agraria Común y cada entrada de un nuevo miembro a la Unión Europea han sido decisivos para llegar a donde estamos hoy. Los tractores salen a la calle en medio de una inflación que, aunque contenida, sigue por las nubes; una política medioambiental que está en el centro de la agenda europea y una mayor concienciación de los consumidores por la calidad de los alimentos que consumimos. Y nosotros, estemos en el lugar de la cadena que estemos, solo buscamos que esos tres ítems se conjuguen: precios justos, protección de nuestros entornos y mayor calidad de nuestros productos.