Los voluntarios y Estrella

Córdoba

La totalidad de la ONG no existirían sin sus voluntarios, a pesar de los buenos profesionales de que puedan disponer. Su implicación, dedicación y generosidad son la fuerza vital de esas organizaciones, cada acción contribuye a un cambio significativo, fortaleciendo el tejido social y creando un impacto perdurable. Tienen un papel fundamental para crear un mundo mejor y más compasivo.

Concretamente la AECC, es mas fuerte gracias a cada uno de ellos y ellas, y así podemos enfrentar desafíos y superar obstáculos que de otro modo serían inabordables. Son una fuente de inspiración y nos permiten construir un legado de servicio que perdura en el tiempo, a la vez que son la esencia de la esperanza y el progreso en un tema tan duro como el cáncer.

Vienen estas palabras, para agradecer a todos su labor, también la de nuestros profesionales, pero, especialmente para recordar a nuestra voluntaria Estrella, que sufrió de manera terrible esta enfermedad, en su familia y en ella misma. A pesar de lo cual siguió luchando de manera incansable, diciendo sí a todas las tareas sin preguntas ni rechazos. La que incansable, dejaba su vida a un lado para darle a la AEC todo y más.

Se nos ha ido una compañera, una persona buena, un ejemplo de esfuerzo, para estar presente en cualquier acto que había que preparar. Se ha ido sin apenas ruido, discretamente, como que aquí estamos esperando a que aparezca para continuar trabajando en lo que se le dijera, siempre dispuesta, con dolor o sin él.

Para ella, desde su casa la AECC, les pedimos una oración, un pensamiento bonito, un buen viaje final. Te quedas en el cielo y en nuestros corazones. Estrella compañera del alma compañera.

Descansa en paz amiga y maestra de vida.