Sergio pendiente de sus centrales

El entrenador amarillo mira de reojo a la enfermería. Lo que parecía una balsa de aceite hace unas semanas, de pronto empieza a tambalearse. Es un tópico decir que los resultados tapan muchas cosas al rededor del mundo del fútbol, pero generalmente es tan tópico como cierto. Por eso, ahora, con solo dos puntos de los últimos doce disputados, empiezan a aparecer 'problemillas' que antes parecían menores.

Era menor que Chust no terminara de arrancar tras un cúmulo de lesiones y molestias que arrastra desde la temporada pasada. Era menor que Meré cogiera la forma a su ritmo y también era menor que Momo no de plenas garantías. Todo eso era menor porque la pelota entraba y sobre todo porque Fali y Luis Hernández sostenían una defensa que parecía en general de garantías. Ahora, sin el valenciano y el madrileño, en su mejor nivel físico, las dudas con los otros reaparecen.

Víctor Chust dio un paso atrás en su recuperación. Meré no termina de arrancar y no terminó ninguno de los dos partidos que jugó desde el inicio. Y Momo genera más dudas que la temporada pasada, sus cualidades son tan evidentes como sus desconexiones. Por eso cruza los dedos el cuerpo técnico para que lo de Fali no sea nada y pueda jugar el sábado ante el Girona y porque Luis Hernández pueda forzar y recuperar en el parón tras el partido ante los catalanes.

Si el míster logra recuperar a los dos jugadores apuntan a ser titulares. El objetivo está claro: recuperar sensaciones de seguridad y con estos dos jugadores es como el equipo se siente más seguro en defensa. Ambos dan poso al equipo, sobriedad y seguridad a sus compañeros. En caso de no poder recuperar a Luis Hernández, que podría tener más difícil su participación que Fali, Meré sería el titular junto al valenciano.