Adepa denuncia que las obras de las Atarazanas han provocado 300 fisuras en el hospital de la Caridad

Sevilla

La asociación en defensa del patrimonio, ADEPA, denuncia públicamente la falta de información sobre las obras de las Atarazanas, tras 6 meses sin reunirse la comisión de seguimiento y cuatro escritos entre marzo y septiembre sin respuesta por parte de la Consejería de Cultura.

Reclaman a los promotores, la Junta de Andalucía y la Caixa, que les informen si en el proyecto tienen previsto recuperar la plaza mayor en la calle Dos de Mayo, como acceso principal, algo que no aceptarán. Además, denuncian los daños ocasionados en el hospital de la Caridad por las obras en la nave siete de las Atarazanas. Se han abierto 300 fisuras superficiales cuya reparación cuesta un millón setecientos mil euros.

ADEPA espera una respuesta en este mes o adoptarán medidas, sin descartar los tribunales, aclarando que su objetivo no es parar la obra sino todo lo contrario.

Sobre su futuro uso

Por otra parte, la Asociación para la Defensa del Patrimonio Histórico-Artístico andaluz (Adepa) ha calificado de "imprensetable" el hecho de que desde la Consejería de Cultura se afirme, en relación con las Atarazanas, que "a posteriori, una vez finalicen las obras, ya se dirá el uso que tendrán en el futuro". "Provoca perplejidad que Arturo Bernal --consejero de Turismo, Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía-- diga a los medios que cuando se acabe, ya veremos".

Así lo ha expresado José García-Tapial, exarquitecto municipal y miembro de la citada entidad conservacionista, en declaraciones a los medios este martes. "No es un planteamiento serio ni riguroso" al hilo del futuro de los antiguos astilleros navales. "Eso hay que saberlo con anterioridad". "El destino de una rehabilitación ha de conocerse antes de la redacción del proyecto, pues casa uso posible requerirá unos equipamientos y dotaciones específicos".

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"Así, por ejemplo, un museo de pintura necesita de unas condiciones de iluminación, climatización y seguridad muy distintas a las de un museo marítimo. Tomar la decisión a posteriori requerirá nuevas obras de adaptación al uso que se decida, con los costes y retrasos que todo ello supone", ha añadido.

En este sentido, desde Adepa exigen que se establezca el destino del "viejo astillero medieval", se informe a la ciudad y que, "de inmediato", se encargue la redacción del correspondiente proyecto museográfico, para que cuando finalice la rehabilitación "sea factible su pronta apertura para el conocimiento, uso y disfrute de los sevillanos", ha afirmado García-Tapial.

Adepa ha querido manifestar sin ambages su "total rechazo" a que esté en el aire una plaza mayor, "abierta a los sevillanos", con acceso desde la calle Dos de mayo, "como planteó" el arquitecto Guillermo Vázquez Consuegra. "Si eso fuera así, iríamos a los tribunales. Eso está prohibido por la Ley de Patrimonio y hay sentencias reiteradas del Supremo. Nos encotraríamos con un problema grave", ha asegurado el presidente de Adepa, Joaquín Egea.

Por último, Egea ha afirmado que si no hay respuesta a estas reclamaciones públicas "habría consecuencias, que irían desde una denuncia ante la Gerencia de Urbanismo hasta el establecimiento de acciones judiciales", aunque no ha querido dar detalles de esas acciones de respuesta.

Dudas sobre el nivel original

Adepa ha pedido también un reformado del proyecto por las dudas existentes sobre la cota original de las Atarazanas. "De los 5 metros por debajo de la cota actual que determinó un estudio del arqueólogo Fernando Amores, a los 2,40 metros que se deduce a partir de la excavación realizada en la zona de la barbacana". "Por este motivo, la duda que se plantea es si estaba inclinado el suelo de los antiguos astilleros". De este modo, "habrá que hacer un modificado que ponga la planta a una determinada profundidad y ese estudio no se puede demorar".

"El convenio suscrito entre Cultura y Adepa estipula que cualquier modificación del proyecto ha de ser conocida y aprobada por la comisión de seguimiento, ignorado en estos momentos la posible existencia y situación de ese reformado. ¿Tiene Cultura algo que decir en relación con esto último?", se preguntan desde la asociación.

La presencia de aguas subterráneas a escasa profundidad "también justifica" el reformado del proyecto, que respondería a cuestiones tales como la profundidad exacta, si es el nivel freático definitivo o "si es de origen natural o producto del as filtraciones del alcantarillado". Para Adepa, esta circunstancia, "de no resolverse, pondría en peligro la excavación de las naves 6 y 7".