Decretan el cierre de un hotel en Benalmádena, con 24 empleados, a pesar de haber regularizado su situación

Málaga

El hotel-apartamento VistaMar de Benalmádena, en Málaga, esta cerrado al público desde el pasado martes 20 de junio por decreto del Ayuntamiento que considera que el establecimiento no cuenta con la documentación reglamentaria sobre el control de legionella y la limpieza de los aljibes de agua. El director del establecimiento, Ali Rahamian, niegan este extremo. Asegura en declaraciones a SER Málaga que cuenta con toda la documentación exigida pero que el consistorio no les ha dejado margen para entregarlo -solo un día, el lunes 19- y que "se niegan a recoger estos papeles" a pesar de que los inspectores que han visitado el hotel "no comprenden la situación tras comprobar que esta todo en orden", según explica el director.

Un total de 24 personas trabajan en este establecimiento reabierto hace dos años. "Estamos en plena temporada alta, con muchos turistas en Benalmádena, y esto no es bueno para la imagen de este municipio", añade Rahamian. El asunto se prolonga desde hace meses y que terminó con la decisión del Ayuntamiento de ordenar el precinto y cierre de hotel. En ese momento había clientes alojados en las habitaciones "y se tuvieron que marchar una vez que se llevó a cabo el cierre". El fin de semana anterior a la clausura, el hotel tenía una ocupación de casi un 100%.

El cierre del hotel esta rubricada por el anterior equipo de Gobierno en el Ayuntamiento de Benalmádena justo en el fin de semana en el que fueron cesados los concejales anteriores y a la espera de la decisión que pueda dar el nuevo gobierno municipal. En el decreto municipal, al que ha tenido acceso la SER, se detalla que "las condiciones técnicas y sanitarias de ciertas instalaciones no garantizan la seguridad de las personas que allí residente". En concreto, con fecha de 27 de octubre de 2022, se detalla que hay cuestiones relativas al control de la calidad del agua de consumo, el estado general de las piscina, la falta de controles de legionella, el empleo de productos inadecuados para la piscina y la caldera de gas en mal estado "se procederá a solicitar la emisión de sendos informes técnicos a departamento de Sanidad y a los Servicios Industriales para que se informe, entre otros extremos, sobre la calidad del agua y de las piscinas del hotel".

Ya el 28 de diciembre de 2022 se llevó a cabo una vista al hotel donde se hallaron "los productos químicos utilizados tanto para el mantenimiento de la piscina como para el agua de consumo humano ratificando que son los correctos" pero se advierte que no disponen de fichas de datos de seguridad ni las fichas técnicas de las mismas, documentación obligatoria. La misma visita concluye con un informe que alerta de que el hotel no dispone de un plan de prevención y control de la legionella, un sistema de autocontrol de las piscina, autocontrol de agua de consumo humano, no se presentan controles de temperatura y cloro, entre otras cuestiones. El asunto termina ahora con el precinto y cierre del hotel a pesar de que su director insiste en que cuentan con toda la documentación en regla.

"Si en una semana no volvemos a abrir, toda la plantilla será despedida", lamenta el responsable del establecimiento que espera lograr una solución para poder reabrir cuanto antes.