La presidenta del PSOE de Sevilla, Amparo Rubiales, ha trasladado este jueves a la dirección socialista su renuncia al cargo para «zanjar la polémica creada» a raíz de sus declaraciones en redes sociales en las que calificó de «judío nazi» al coordinador general del Partido Popular, Elías Bendodo. Así lo han confirmado a la Cadena SER fuentes del partido en Sevilla, que han apuntado que la dirección «ha aceptado su renuncia», al tiempo que le ha agradecido «su disponibilidad y labor en esta etapa». La dirección del PSOE sevillano había pedido a la histórica dirigente «una rectificación», tras desvincularse de las declaraciones que, según el partido, Rubiales realizó a título personal en sus redes sociales. La hasta ahora presidenta del PSOE de Sevilla, la agrupación más importante de Andalucía, ha corregido ya de madrugada aunque solo a medias, ya que pedía disculpas por llamar judío nazi Bendodo, pero insistía en que el coordinador general del PP es un nazi. También señalaba que jamás debe usarse la religión, origen o etnia de alguien para la crítica política aunque en su caso la intención fue señalar una grave incoherencia. La insistencia de Amparo Rubiales seguía cosechando este jueves críticas de dirigentes populares, entre otras, la de su presidente Alberto Núñez Feijoo, que también en Twitter decía que era inaudito que esta persona siguiera en el PSOE. También el PP de Málaga, al que pertenece Elías Bendodo pidió la dimisión o cese inmediato de la presidenta del PSOE de Sevilla, Amparo Rubiales. «Mientas siga como presidenta del PSOE de Sevilla, tanto Pedro Sánchez como Juan Españas son corresponsables de estas declaraciones, algo a todas luces inaceptable», aseveraba el partido. El propio Bendodo, que proviene de una familia judía sefardí, ya replicaba a Rubiales, asegurando que «quien califica así se califica a sí mismo». También Cuca Gamarra o el PP rechazaron las palabras de Rubiales, así como la Federación de Comunidades Judías de España, que representa oficialmente a los judíos españoles.