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Continúa la compleja autopsia al cadáver mutilado de una mujer en Marbella

El cuerpo encontrado podría llevar sin vida entre 24 y 36 horas cuando se localizó junto a la zona residencial de Marbesa

05/06/2022 Un agente de la Guardia Civil, de espaldas, junto a un vehículo oficial SOCIEDAD GUARDIA CIVIL / GUARDIA CIVIL

05/06/2022 Un agente de la Guardia Civil, de espaldas, junto a un vehículo oficial
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Los forenses continúan realizando la autopsia al cadáver mutilado de una mujer joven hallado en Marbella este domingo flotando en el mar, una tarea que está siendo compleja y lenta por el estado en el que se encontró el cuerpo, sin cabeza ni manos. Fuentes cercanas a la investigación han informado este miércoles que el complicado estudio forense que se lleva a cabo no ha concluido aún y que se han entregado muestras de ADN a la Policía Científica para su cotejo con familiares.

Han explicado que se han efectuado todos los exámenes y acciones necesarias para determinar las circunstancias de la muerte, mientras que la identificación corresponde a la Policía Científica con el ADN y las pruebas que puedan recabar. Una investigación de la Guardia Civil sobre este cadáver que prosigue al igual que las pesquisas de la Policía Nacional respecto a la desaparición -también en Marbella- de una mujer colombiana de 46 años víctima de violencia de género.

Por esta desaparición ya han sido detenidas dos personas: primero su expareja -un colombiano de 45 años- que fue arrestado al día siguiente de la localización del cuerpo por su presunta implicación en un delito de quebrantamiento de condena, y el segundo -amigo de él- este miércoles. En caso de que las pruebas de ADN determinaran que se tratara de la misma mujer, se unirían ambas investigaciones, han indicado otras fuentes.

El cuerpo encontrado podría llevar sin vida entre 24 y 36 horas cuando se localizó junto a la zona residencial de Marbesa, en la playa entre Elviria y Las Chapas; un cadáver que presentaba una gran incisión en el abdomen y cuya identificación se vio dificultada, ya que al no tener manos no se pudieron tomar huellas dactilares. Fuentes policiales indicaron tras el primer arresto por la desaparición que no había ninguna prueba que vinculara ese asunto con el cadáver hallado.

Los familiares de la desaparecida denunciaron que no la localizaban y que ella había recibido amenazas por teléfono días atrás de su expareja, que habría quebrantado las medidas cautelares dictadas por la autoridad judicial tras su arresto a mediados de diciembre por malos tratos. La Policía llegó hasta el primero de los detenidos por el testimonio de unos familiares de la desaparecida que creyeron reconocer restos de ella en el cuerpo mutilado al ver unas imágenes que habían sido distribuidas a través de redes sociales.

 
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