Los Caseteros de Granada: "El Ferial hay que reformarlo por completo"

Granada

Granada está de feria. Después de semanas de preparación, el recinto ferial de Almanjáyar recibe a miles de personas que lo encuentra adecuadamente vestido y decorado. Es la parte que se ve, pero la que no se ve sigue necesitando de "un proyecto definitivo de reforma", dice Claudio Rodríguez, presidente de la Asociación de Caseteros de Granada. "Cuando llegas antes de montar las casetas se te cae el alma al los pies", cuenta Ana Poley, también miembro de la junta directiva, quien añade con cierta ironía que "allí habitan todo tipo de animales", argumentario que completa José Antonio Muñoz con un rotundo "necesita de todo, un arreglo muy grande de infraestructuras, de luz, agua, saneamientos; es casi hacerlo de nuevo".

Durante la entrevista, los tres caseteros establecen comparaciones con otras ferias de Andalucía donde sí apuestan por la excelencia y por la grandeza. "Granada no sabe vender su feria", dice Claudio, para añadir que "la promoción que se hace deja mucho que desear. La celebración de la Fiesta del Corpus tiene más de 500 años y tenemos que conseguir que sea un argumento más que se una al atractivo turístico que tiene Granada. La parte positiva de todo es que hay mucho espacio para crecer".

Pero no todo es malo, ni mucho menos. El Ferial cuenta este año con 73 casetas, 16 más que en la última edición antes de la pandemia, y la animación es espléndida como ya se pudo apreciar durante los primeros días, sobre todo tras una "apoteósica" noche del sábado. Mirando al futuro, José Antonio Muñoz cree que "la feria se encuentra ahora mismo en una evolución muy buena".

También rememoran los mejores momentos que viven los caseteros durante la feria, los prolegómenos y actividades de hermandad. "Ser casetero significa tener tu casa en la feria, y es vivir una feria de una forma totalmente diferente", dicen casi al unísono, orgullosos y convencidos. Les espera la mejor semana del año.