Fran Fernández: Todos los días nos acordamos de lo que nos pasó en el accidente del 100% Fun

Fue un 5 de agosto de 2017 cuando en el hotel 100% Fun se producía un mortal accidente como consecuencia de la explosión de un transformador de Endesa. Ese accidente se cobró la vida de dos jóvenes, Mari Luz Morillo y Sara Ojeda y cambió la vida dejando importantes secuelas físicas a seis compañeros más, Kisko, Esther, Fran, Irene, Juan Antonio y Dani. Habían salido a cenar al patio a eso de las siete y media de la tarde antes de comenzar su turno de trabajo., bromas comentarios y, de repente, la explosión que los marcaría de por vida.

Ayer se conocía, a través del diario digital Tarifa Al Día, que tres responsables de ENDESA y las empresas filiales encargadas del mantenimiento y revisión del transformador, que produjo la deflagración, deberán hacer frente a penas de hasta cuatro años de cárcel y a unas indemnizaciones de tres millones de euros a los afectados, que es lo que solicita el Ministerio Fiscal y la Acusación Particular.

Hoy hemos hablado con Fran Fernández, uno de los jóvenes heridos en el accidente. "Cada día nos acordamos de lo que nos pasó en ese accidente del 100% Fun. Yo vi mi cuerpo envuelto en llamas. Pensaba que no volvería a ver a mi madre. Tengo un 75% de mi cuerpo quemado". Sobre la petición del Ministerio Fiscal y la Acusación Particular Fran nos decía que "cuando mi abogada me lo comunicó se me puso el vello de punta. Que la fiscalía coincidiese con lo que nuestros abogados pedía me produjo una gran satisfacción. Pero para nosotros nunca va a quedar resuelto nada en cuanto a nuestro bienestar".

Juan Ramón Ojeda es el presidente de la asociación de Afectado por el Accidente del Transformador y también ha pasado por el programa. En aquel fatídico día perdió a su hija Sara que tenía 32 años. Recordaba que se encontraba junto a su esposa en la playa de Bolonia, "cuando recibí una llamada que me avisaba del accidente. Salimos de inmediato hacia el Hospital Punta Europa. Imagínese como estaba la carretera hasta Algeciras, fue un auténtico calvario".

Ahora tras conocer la petición de penas para los inculpados Ojeda dice que nunca habrá justicia en el mundo capaz de resarcirle de tanto dolor causado, "lo que sí espero es que algo así no vuelva a ocurrir". Hemos enviado escritos a la Junta de Andalucía para que se modifiquen los protocolos de inspección de los transformadores y que se certifique que la distribuidora cumple con la ley".

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