El enano infiltrado de Ruiz Vivo: 'Yo también soy refugiado'

Murcia

José Antonio Ruiz Vivo ha dejado esta semana a un lado las disputas y los entresijos de la política, a los que cada semana dedica su columna de opinión, para mirar de frente y de una forma muy personal a lo que ocurre en Ucrania. La derivada de una invasión por parte de Rusia que ya supera los cuatro millones de refugiados. Hasta la fecha más de cien mil han llegado a España.

Entre todas esas familias que huyen de la guerra, Ruiz Vivo nos cuenta la historia del pequeño Mateo, un niño ucraniano de tan solo dos años que desde hace unos días reside junto a su familia en Ceutí, en la casa familiar de nuestro columnista, y donde su padre trata de explicarle como si de la película La vida es bella se tratase lo que ocurre en su país. Mateo y su familia tuvieron que salir por temor a perder sus vidas desde una de las ciudades más arrasadas por parte del ejercito ruso, la ciudad portuaria de Mariúpol.

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Un testimonio que nos reconcilia con el ser humano y con el que deseamos que el pequeño Mateo y su familia puedan vivir tranquilos y en paz en una casa que ocuparon buenas personas y que ahora abraza a estas familias.