Gastan todos sus ahorros para salvar el dulce canario
Los dulces típicos canarios sufren también los sobrecostes de la energía y de las materias primas. En la Dulcería Nublo de Tejeda, una de las pastelerías más famosas de Gran Canaria, han destinado 18 mil euros a comprar azúcar y aceite poder asegurar la producción en los próximos meses: "Cuando no falta una cosa, falta la otra".
Dulcería Nublo en Tejeda / Archivo
Las Palmas de Gran Canaria
Los dulces típicos canarios sufren también los sobrecostes de la energía y de las materias primas. En el caso de una de las dulcerías con más tradición de la isla de Gran Canaria, la dulcería Nublo de Tejeda, ante el temor de desabastecimiento por la huelga en el transporte, han decidido destinar todos sus ahorros -18 mil euros- a comprar casi 40 mil kilos de azúcar para poder asegurar la producción de sus famosos dulces de almendra durante los próximos meses.
Rosa María Medina, propietaria,cuenta que han decidido prepararse ante la constante subida de precios: "Cuando no falta una cosa falta la otra, así que hemos comprado bastante cantidad de los productos que más necesitamos para poder seguir haciendo nuestros dulces". "Es un disparate lo que estamos viviendo", dice también Medina que lamenta que los pequeños y medianos empresarios y los autónomos sean los que de nuevo tengan que apretarse más el cinturón.
"Yo confío en no tener que mandar a nadie al paro pero los gastos no dejan de crecer", comenta esta repostera a la Cadena SER que pone algunas cifras a esos gastos: "Nosotros el aceite de girasol lo comprábamos a 25 euros 25 litros al por mayor y la semana pasada ya estaba a 52 euros; el saco de azuáucar ha pasado de 12 a 19 euros... Y a esto súmale el gasóil porque nosotros vivimos en Tejeda por lo que nos tenemos que trasladar mínimo 40 kilómetros con los repartos o las compras".
La Dulcería Nublo gasta todos sus ahorros para salvar sus pasteles
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Para hacer frente a la subida de precios han tenido que aumentar los suyos en las ventas a las grandes superficies: "Este próximo martes tengo una reunión con grandes superficies; una ya nos ha dicho que no va a vender nuestros productos pero lo que no puedo hacer bajar la calidad para que sean más baratos".
Aunque por ahora el pequeño consumidor sigue comprando su repostería al mismo precio, no descartan subirlo próximamente: "No es una subida caprichosa, no lo hacemos porque queramos sino porque no llegamos. No salimos de una para meternos en otra: incendio, pandemia y ahora esto".
