Cuando la peor reacción es el pasotismo y la dejadez, es cuando tienes un serio problema
La afición amarilla se marchó del Gran Canaria antes de tiempo y sin casi levantar la voz
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Las Palmas de Gran Canaria
Muchos eran los aficionados que pedían la salida de Pepe Mel del banquillo de la Unión Deportiva Las Palmas al considerar que con otro entrenador se podría mejorar clasificatoriamente. La derrota ante el Fuenlabrada (3-2), a pesar de haber ganado el derbi ante el CD Tenerife (0-1) y empatarle al líder Almería (1-1) las dos jornadas anteriores, precipitaron los acontecimientos y Luis Helguera, el máximo responsable de la parcela deportiva, el mismo que en el verano habló con varios técnicos para que dirigieran la nave amarilla, decidió que el tiempo de Mel había llegado a su fin. ‘Avalado’ por los datos del departamento Big Data lograron convencer al dueño de la entidad del necesario cambio.
Lo que nadie podía pensar es que la apuesta fuera por un total desconocido e inexperto en el fútbol profesional como Xavier García Pimienta. Como con Quique Setien salió tan bien, Helguera pensaría que volver a la fórmula de una apuesta exótica que pudiera darle un giro a la situación sería exitoso. Vamos, una decisión muy arriesgada que como te saliera bien te encumbrabas, ya que con Setién salió maravillosamente bien, pero con Pimienta horrorosamente mal. Una sólo victoria en siete partidos y de estar a tres de la promoción a distanciarte a nueve. Está claro el error, pero no sólo por los puntos, sino por un juego, que ha perdido toda la chispa y creatividad pasada, aumentando los groseros errores atrás.
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Miguel Ángel Ramírez vuelve a fracasar en su intento de ascender a Primera División, es la realidad palmaria de la Unión Deportiva. Su modelo no le da para ascender, y en vez de mejorar se empeora, pero si se volverá a presumir de solventes beneficios, pero ese dinero no se ve en el campo, y así nos va... Se presume de grandes instalaciones en Barranco Seco, esas que costaron un pastizal, de beneficios anuales, pero la gestión deportiva es un desastre continuado con un núcleo duro compuesto siempre por los mismos Juanito y Branko, que cuando estuvieron en primera línea demostraron su incapacidad manifiesta, pero en segunda línea están más protegidos y parece que nada va con ellos, cuando son los que asesoran al dueño del club. Lo importante es que a Ramírez le sirven y le vienen bien para sus operaciones, pero no a la Unión Deportiva, que es lo verdaderamente importante. Bueno, mejor dicho, era lo importante o debería ser lo importante, pero ahora no lo es tanto, ya que primero están los beneficios…
Tira uno la vista atrás y se acuerda cuando la entidad no era de propiedad de Ramírez Alonso, cuando el equipo no tenía para pagar ni el agua del césped, cuando los ayuntamientos de la isla y los pequeños empresarios daban lo que podían para que la entidad pudiera continuar su camino; cuando la gente se enfadaba y el que presidía se tenía que ir por su errática gestión y los abonados decidían sus sustitutos. Casi sin darnos cuenta, cuando todos los veranos teníamos que esperar a que se le pagara a los jugadores para no descender de categoría, cuando teníamos todas las semanas la soga al cuello, el club era nuestro, de la sociedad, a pesar de administrar miserias, pero siempre se estaba peleando por ascender a Primera o no bajar a Segunda. Pero ahora, con múltiples beneficios temporada tras temporadas, pagando sueldos muy altos a ejecutivos de dudosa gestión y donde el presidente cobra un porcentaje del presupuesto anual, tienes que regalar entradas a diferentes colectivos o realizar promociones para que la afición acuda al estadio, ese que ellos mismos han vaciado con su mal proceder y discurso altanero en momentos concretos que nadie olvida.
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Lo peor, que el hartazgo es de tal calibre que cuando la peor reacción a una dolorosa derrota ante el Girona (1-3) es la del pasotismo y la dejadez, es cuando verdaderamente se toca fondo y tienes un problema serio.
La afición pide cambios, pide responsabilidades, pide manifestarse, no ir al estadio como señal de protesta, pero seamos serios nada cambiará porque hay un dueño que seguirá priorizando seguir ganando dinero y que no saldrá salvo que un incauto pague lo que pide, a pesar de no valerlo, por lo que dejen de coger lucha por lo mal que están las cosas y ocupen su tiempo y energías en otras cosas que merezcan más su esfuerzo y la pena, donde su grito pueda ser escuchado y se tomen medidas al respecto, porque la Unión Deportiva Las Palmas Sociedad Anónima Deportiva no es suya ni mía, es de Miguel Ángel Ramírez Alonso, que hace y seguirá haciendo lo que a él más le benenfice.
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Rafa León
Desde 2001 en Cadena Ser Las Palmas cubriendo toda la información referente a la Unión Deportiva Las...