Comienzan los juicios para desalojar a las inquilinas del edificio de Cala de Bou
El fondo buitre propiedad del inmueble trata de desahuciar a las siete familias que todavía viven en el edificio
Imagen del edificio de Cala de Bou / Cadena SER
Ibiza
Comienzan los juicios para desalojar a los inquilinos que todavía viven en pisos de un edificio de Cala de Bou propiedad del fondo buitre Promotora Coliseum y que se negó a renovar los contratos de alquiler. Este fondo ha presentado varias demandas para tratar de acelerar los desahucios. Este viernes está cita en el juzgado una de las inquilinas que se negó a abandonar su inmueble a la finalización de los contratos, ya que habían pactado una renovación de los mismos. Recordemos que todas estas personas pactaron con el Banco Sabadell, el anterior propietario del edificio, dicha renovación porque además se trata de alquileres sociales.
Inicialmente, eran once las familias afectadas, a día de hoy quedan 7 residiendo en pisos. Desde el sindicato de inquilinas aseguran que reciben desde hace años un acoso constante de llamadas para que salgan de los inmuebles y que se les ha llegado a ofrecer hasta 9.000 euros. También desde Unidas Podemos, que en todo este tiempo han reclamado una solución para todas estas personas, critican la estrategia que está siguiendo este fondo buitre y lamentan que no quiera sentarse a negociar unido a las dificultades que tienen para poder contactar con algún responsable de ese fondo, ya que todos los contactos que tienen se hacen a través de terceras personas y siempre por correo. Pero cada vez que se ha conseguido iniciar una negociación, la persona encargada deja de responder a los correos.
Guadalupe Nauda, portavoz de la formación en Ibiza, dice que tratarán de evitar este desahucio e insiste en reclamar una propuesta "satisfactoria" para todas estas familias.
El sindicato de inquilinas denuncia que las viviendas que han ido quedando vacías no se está poniendo en venta ni se alquilan. Se están tapiando para evitar la entrada de okupas. Señalan que el edificio está en un estado de semi abandono. Por todo ello, dicen que si no se llega a un acuerdo con las inquilinas, se pedirá al Govern la expropiación del edificio porque dicen que no se puede permitir que se siga haciendo un uso antisocial de la propiedad en Ibiza.
