Un libro y una exposición en el IVAM recuperan el grafismo de las discotecas valencianas en los 80 y 90

‘Ruta gráfica. El diseño del sonido en València’ reúne parte del universo contracultural que surge a principios de los ochenta desde la escena ‘underground’, y que se desarrolló hasta derivar en un movimiento único. Un movimiento que generó una estética particular hasta el punto que algunas imágenes asociadas a la ‘Ruta del Bakalao’ (aunque el término solo alude a los años 90) se han convertido en auténticos iconos populares, plenamente transversales y que trascienden generaciones y territorios.

Comisariada por Antonio J. Albertos, Alberto Haller y Moy Santana, la muestra reúne 132 carteles, 86 ‘flyers’ y dos películas documentales que incluyen entrevistas con los protagonistas: artistas, impresores, promotores, gestores. Como escribe el dibujante Paco Roca en el prólogo del libro que acompaña la muestra, “dibujantes de cómic que creaban portadas de discos, músicos que colaboraban en fanzines, modistos que diseñaban carteles…”.

Dibujantes tan conocidos hoy en día como Mariscal, Miguel Calatayud, Sento Llobell, Micharmut, Daniel Torres, Manel Gimeno o Ramón Marcos, integrantes de la denominada Nueva Escuela Valenciana de Cómic, diseñaron carteles para estas salas en los años ochenta. Junto a ellos, la muestra incluye piezas de otros creadores reconocidos como Paco Roca.

El coleccionista Moy Santana ha narrado la génesis del proyecto. “La idea surge cuando decido digitalizar una colección de más de dos mil ‘flyers’ durante el confinamiento y descubro que muchos de ellos estaban firmados por nombres muy conocidos”. El resultado es un libro y una exposición que resumen “una pequeña parte del proceso de investigación llevado a cabo”, según el historiador Antonio J. Albertos. La exposición dedica un apartado al diseño gráfico generado por la discoteca ACTV. Una imagen creada por los diseñadores Quique Company y Paco Bascuñán, procedentes de La Nave, que se acabó convirtiendo en la imagen icónica de la ‘Ruta’.

La última parte está dedicada a los años noventa, cuando el trabajo de confección de carteles se mercantilizó, y en muchas ocasiones eran las propias imprentas las que se encargaban de crear estos materiales. Sobre el estigma asociado a este movimiento, Alberto Haller ha destacado que “‘Ruta del Bakalao’ es el nombre que se acuñó cuando se masifica”. En este sentido, ha resaltado la importancia de “poner en valor el diseño gráfico ligado a la escena de clubs de los años ochenta y noventa y el esplendor creativo que se desarrolló con nombres tan importantes del mundo de la ilustración y el diseño”.