Poco botín para el Atlético de Madrid en el resurgir de Joao Félix
Los de Simeone empatan ante el Manchester United en los octavos de Champions League pese a ser muy superiores a sus rivales
El Atlético de Madrid empata contra el Manchester United (1-1) en la ida de los octavos de final. Los de Simeone firmaron la mejor primera parte de temporada, pero la falta de puntería acabó premiando a un gris Manchester United que aprovechó la única ocasión clara que tuvo
La puntería penaliza a un gran Atlético
El Metropolitano no será el Calderón, pero no se podía negar el ambiente que tenía en esta noche europea contra el Manchester United. La afición ya había respondido al llamamiento, así lo que tocaba era que los jugadores ir a por sus rivales sin miramientos. Poco tardaron en cumplir. Renan Lodi se aprovechó de la discordia en la defensa del United para poner un centro medido al corazón del área, encontrando el balón el único ganador del tira y afloja entre Simeone y la directiva: Joao Félix. El portugués, que se había zafado con suma facilidad de Maguire gracias a un gran desmarque, remató como el mejor Falcao ante un De Gea que solo pudo mirar. El Metropolitano golpeaba primero en el minuto 6 ante un United que no se había bajado del autobús.
Pese a que los de Old Trafford intentaron dar un paso adelante, los colchoneros consiguieron apagar rápidamente el fuego. Renan Lodi, muy suelto en la izquierda gracias al gran desempeño en defensa de Reinildo, estaba volviendo loco a Lindelof, el central que había elegido Rangnick para ser el lateral derecho del equipo. Con esa amenaza constante, el United estaba obligado a dar un paso atrás para frenar la sangría e intentar acercar a sus jugadores para hacer pases menos arriesgados, pero la presión del Atlético de Madrid era perfecta, digna del mejor Barcelona de Guardiola. El único pero llegaba en la gestión de las jugadas en los últimos metros, decidiendo tan mal los de Simeone que solo chutaron una vez entre los tres palos (el remate de Joao Félix) pese al enorme número de acercamientos al área rival.
Simeone había conseguido algo impensable hace dos semanas: el Atlético estaba volviendo a defender como antes. Aun así, había un problema en el inicio de la segunda mitad. A cada minuto que pasaba, el Atlético perdía metros y se parapetaba más cerca de Oblak, algo que nunca es buena noticia ante Cristiano Ronaldo. El resultado, demasiado corto tras lo visto en la primera mitad, daba esperanzas a unos e inseguridad a los otros. Por tanto, el Atlético de Madrid tenía que ir a por el partido en ese momento. Las piernas seguían respondiendo y quedaba gasolina en la reserva, por lo que tocaba asestar el golpe definitivo al Manchester United antes de que los minutos se comenzasen a hacer más largos. Para darle algo más de energía, Simeone sacó a Joao Félix y Lodi (posiblemente, los dos mejores jugadores del Atlético y que se fueron con una sonora ovación) por Griezmann y Lemar.
Al final, pasó lo que parece inevitable en estas eliminatorias europeas. Tras una bronca monumental del Metropolitano a Cristiano Ronaldo por un lanzamiento de falta que se fue desviado, Elanga aprovechó un pase de Bruno Fernandes después de una pérdida rojiblanca para castigar al Atlético ante un Oblak que pudo hacer mucho más. Para más castigo, Griezmann estuvo cerca de marcar un gran gol a la salida de un córner, pero acabó estrellando el balón en el larguero. Por ironías del destino, estas jugadas para olvidar llegaron tras sacar a Joao Félix del campo. Con ello, el Atlético se jugará la vida en la Champions ante el Manchester United en Old Trafford tras firmar uno de sus mejores partidos de la temporada. Como diría aquel, "el fútbol es así".