Cuando España hizo campaña para que las niñas fueran a la universidad
Hace tres décadas el Instituto de Mujer animaba a las familias a que no pusieran límites a la educación de sus hijas
En 2018 el 55% de los alumnos y casi el 60% de los titulados universitarios fueron mujeres
Center of Southwest Research, Universidad de Nuevo Mexico
La campaña es de finales de los 80. La impulsaba el Instituto de la Mujer y se acuerda muy bien de ella María José Díaz-Aguado, catedrática de psicología de la educación de la Universidad Complutense de Madrid: "Para destacar los avances en igualdad es importante tomar perspectiva, retroceder 30 años. Entonces se tuvo que hacer una campaña que decía a las familias: "No limites su educación. Es una mujer del siglo XXI". En el cartel salía una niña de unos seis años jugando a dirigir una orquesta como si quisiera dirigir el mundo".
Center For Southwest Research (U.Nuevo Mexico)
Center For Southwest Research (U.Nuevo Mexico)
Entonces las mujeres aún no eran ni la mitad de los alumnos matriculados en la universidad. Tres décadas después son el 55% de los estudiantes y obtienen el 60% de las titulaciones. Díaz-Aguado, que participó este lunes en la presentación del informe Igualdad en Cifras elaborado por el Ministerio de Educación y Formación Profesional, relaciona ese avance con dos factores: "Han combinado la posibilidad de soñar con futuros ambiciosos, con puestos profesionales que tiene una gran relevancia en la organización de la sociedad, con un valor femenino al que no han renunciado: el trabajo sacrificado con resultados a largo plazo". El cartel fue también portada de la revista que publica periódicamente el Consejo Escolar del Estado en un monográfico dedicado a la igualdad en la Educación.
Entre los retos pendientes que refleja el informe publicado este lunes: conseguir la igualdad en los puestos de más responsabilidad que en la universidad siguen copados por hombres. Sólo el 20% de los catedráticos en España es mujer y hay ocho rectoras en las 50 universidades públicas. También acabar con la brecha laboral y salarial que sufren las mujeres ya que a pesar de su mejor formación tienen, de media, más paro, peores salarios y sufren más la precariedad. Entre quienes tienen educación superior, por ejemplo, la tasa de paro de los hombres es del 7%, la de las las mujeres del 9,7%. Entre los que sólo tienen la secundaria el paro es de un 11,4% para los hombres y un 16,4% para las mujeres.
El Secretario de Estado de Educación y Formación Profesional, Alejandro Tiana, cree que "hay un desfase grande entre el sistema educativo y el sistema productivo y laboral. Yo creo que la brecha de género en educación se va cerrando a una velocidad razonable pero, en cambio, en el ámbito laboral va más por detrás". Tiana apuesta por medidas como la equiparación de los permisos de maternidad y paternidad, aprobado recientemente por el Gobierno, para corregir estas diferencias.
El estudio también refleja la brecha de género en las disciplinas científico-tecnológicas tanto en las enseñanzas de FP, como en las carreras universitarias. Solo el 8% de alumnos que cursa Informática en FP de grado medio son mujeres, al igual que el 4,9% matriculado en Electricidad y Electrónica en FP superior. En el curso 2017-2018, el 12,2% matriculado en el grado de Informática o el 28,4% de los grados de Ingeniería, industria y construcción son mujeres.
Los chicos tienen peores resultados en general en todas las etapas de la enseñanza: peores tasas de graduación y de idoneidad. También sufren mucho más el abandono escolar temprano algo que la profesor Díaz-Aguado relaciona con el machismo porque asegura "el machismo busca resultados inmediatos. La idea machista del héroe es poco compatible con de pasar mucho tiempo en la escuela y realizar un trabajo sacrificado y abnegado. Quizás deberíamos hacer ahora una campaña que dijera a las familias. Es un hombre del siglo XXI edúcale en la igualdad. El machismo va a obstaculizar su desarrollo, su bienestar y el de quienes les rodean".
