La población inmigrante en La Rioja Baja representa un 18,37%

La Rioja Baja

En La Rioja Baja la población inmigrante representa un 18,37%, dato superior al del conjunto de la Rioja, donde la tasa se sitúa en el 13,05%. El sociólogo y profesor de la Universidad de La Rioja, Sergio Andrés Cabello, explica en el programa Hoy por Hoy La Rioja Baja, que esta comarca, por sus características productivas y económicas registra un mayor porcentaje de población extranjera. "Municipios como Autol, Pradejón o Aldeanueva de Ebro tienen un mayor porcentaje de población inmigrante por las actividades agrícolas, del sector primario que se desarrollan". Explica el sociólogo, que en Pradejón, la población extranjera representa el 35,45% y en el caso de Autol el 36,77%. "Son municipios donde hay una mayor diversidad cultural por su capacidad de atracción en función a estas actividades. Es una realidad muy consolidada de la sociedad que estamos construyendo".

En cuanto a la natalidad, Sergio Andrés Cabello explica que en la población inmigrante, es más elevada. Sin embargo asegura que las nuevas generaciones se van a acercando cada vez más a la media de la población autóctona.

Uno de los principales retos que tiene la región es el relativo a la inclusión. "Esa inclusión no pasa solo por cómo tratamos y atendemos la diversidad sino que también lo tiene que hacer con procesos socioeconómicos, qué es donde se observan escenarios más complejos. Es evidente que la inclusión tiene que ser global. Yo creo que en La Rioja, con margen de mejora, pero no lo estamos haciendo mal", concluye.

Programas de Atención al Inmigrante

Ante esta realidad, Cruz Roja trabaja desde hace 29 años con programas para guiar, acompañar y asesorar al inmigrante. En La Rioja Baja son tres puntos de información repartidos a lo largo de la comarca: en Calahorra, Arnedo y Alfaro. A través de trabajadores sociales se atienden las necesidades todo el territorio. "La demanda es mayor. No deja de llegar población extranjera hasta La Rioja. Atendemos a más de 1000 personas al año", explica Isabel Manzanos, la responsable del programa Inmigrantes Refugiados de Cruz Roja.

Noemí trabaja en Calahorra y Judith atiende a la población de Alfaro. Hasta allí llegan personas recién aterrizadas en España que buscan orientación y ayuda para iniciar la vida en un nuevo municipio con características muy diferentes a su lugar de origen. "Vienen con miedos, muchas veces con información que no es correcta", señalan. Además, desde estos puntos también se trabaja la inclusión, algo que es fundamental.

Mouna es marroquí. Llegó hace varios años a Calahorra. Su principal barrera ha sido el idioma pero asegura que programas como el de Cruz Roja, son de gran ayuda para empezar a desarrollar un proyecto de vida.