El hartazgo de vecinos del Casco Viejo de Pamplona: "Se han roto todos los equilibrios"

Pamplona

Algunos balcones y ventanas de viviendas y locales del Casco Viejo de Pamplona presentan estos días carteles con la leyenda 'Se vende/Salgai'. En realidad, no es que estas viviendas o locales se encuentren en el mercado inmobiliario. Se trata de una campaña vecinal que lo que pretende es denunciar la "mercantilización" del corazón de Pamplona. "El Casco Viejo no se vende", es el lema de esta campaña. Toni Iragi, portavoz de la asociación vecinal Alde Zaharra, explica: "la campaña la iniciamos esta semana y ya hemos terminado el buzoneo en todos los portales del barrio explicándola y haciendo un llamamiento al vecindario".

Tratan de denunciar que "el barrio está mercantilizado y se está poniendo por delante el negocio frente a los intereses del vecindario". Y explica con algunos datos esta apreciación: "Hay que tener en cuenta que somos el 5,6 por ciento de la población de Pamplona y contamos con 137 establecimientos de hostelería, una proporción totalmente desorbitada con las consecuencias que supone de saturación, de masificación, de ruidos y molestias". También señala que el Casco Viejo pamplonés soporta "más de la mitad de los apartamentos turísticos de la ciudad". Además, "el 80% de los eventos que se celebran en la ciudad se hacen en el Casco Viejo".

Explica Iragi que "muchas personas llevamos viviendo aquí toda la vida; nos gusta vivir en este barrio y sabemos que tiene unas características especiales por ser el centro de la ciudad. Nos gusta el ambiente, el poder echarnos un pote en el barrio, pero hemos llegado a una situación en la que se han roto todos los equilibrios". Y añade que no tratan de vivir en el silencio de una casa de pueblo, sin molestias ni ruidos, "simplemente pedimos los mismos derechos y las mismas condiciones que puedan tener otras personas que viven en otros barrios". Añade que "se nos olvida que el centro de la ciudad es también un barrio donde viven personas y también tenemos derecho a llegar a casa sin tener que pasar entre un montón de gente, poder descansar y no tener que soportar de jueves a domingo un montón de actividades".

La elevada concentración de hostelería en este barrio de Pamplona no es una cuestión de nuestros días. "Se viene arrastrando ya desde hace un montón de años". Recuerda Iragi que en 2006, cuando ya se había declarado el Casco Viejo como una zona saturada de establecimientos hosteleros, se cambió la normativa y se abrió la veda a instalar nuevos establecimientos con la categoría de cafeterías o restaurantes y estamos viendo que ahora algunos de esos establecimientos son bares especiales". "El proceso ha ido a peor y es lo que denunciamos: que se está utilizando el barrio al servicio del mercado, de intereses privados y se están dejando muy aparte los intereses del vecindario".

Los carteles de 'se vende', que se pueden obtener en las sedes de Plazara!, en la calle mayor 31, y Auzoenea, en la calle Aldapa 3, y también en las oficinas de SOS Racismo en la calle Zapatería 31, se mantendrán hasta el día 18 de marzo. ese día esta previsto un acto a mediodía (12.30) en la plaza de los Burgos, donde se destruirá toda la cartelería colocada en esta campaña vecinal.