Otras 8.000 viviendas navarras de protección oficial perderán su calificación en los próximos 4 años

Pamplona

El consejero de Vivienda, José María Aierdi, ha detallado que, desde 1994, el número de viviendas de protección oficial que han perdido su calificación asciende a 18.645. Una cifra que se verá incrementada en los próximos años: hasta 2027, otras 7.909 viviendas perderán su calificación de protección oficial. Una situación que el Ejecutivo no puede revertir a pesar de que el año pasado aprobó una norma que establece que la calificación de protección oficial se mantendrá de manera indefinida. Aierdi ha detallado que "la calificación indefinida de vivienda protegida se aprobó en el verano de 2022 y las leyes no pueden tener carácter retroactivo. Por tanto, es a partir de esa fecha cuando se establece esa limitación y esa calificación indefinida.

¿En qué vías trabaja el Gobierno para suplir las carencias de vivienda protegida?

Este lunes, el consejero de Vivienda, José María Aierdi, ha presentado la segunda fase del Navarra Social Housing, que prevé la incorporación de 810 viviendas al sistema público de alquiler. Estas viviendas -impulsadas también desde Nasuvinsa- se construirán hasta 2026 y se distribuirán por toda la geografía navarra. Entre este año y el que viene, Aierdi prevé poder entregar las primeras 520 viviendas de la primera fase del plan, que se lanzó en 2017. En total, entre las dos fases del Navarra Social Housing se van a construir 1.330 viviendas.

En esta segunda fase, se han habilitado tres vías para promocionar vivienda pública de alquiler: promoción de vivienda pública por parte de Nasuvinsa en suelo municipal cedido por 14 entidades locales, la figura del derecho de superficie en suelo público o la producción de vivienda protegida, cuya gestión del alquiler será pública.

Por un lado, en cuanto a la promoción de vivienda pública en parcelas cedidas por los ayuntamientos, se contempla la construcción de 148 pisos de alquiler en Alsasua, Sangüesa, Huarte, Lodosa, Puente la Reina, Lumbier, Baztan, Cárcar, Peralta, Ororbia, Lerín, Arbizu, Valle de Arce y Sorauren. Siguen pendientes de la respuesta de Pamplona a la propuesta elaborada por el departamento.

Por otro lado, el director gerente de Nasuvinsa, Alberto Bayona ha detallado que el segundo modelo sería la colaboración público-privada: "Sobre suelos privados, de empresas privadas, se construyen las 221 viviendas que componen este modelo y donde la inversión es 100% privada". En este caso, será Nasuvinsa quien se encargue de gestionar durante un periodo determinado el alquiler de estas viviendas.

Por último, en lo que respecta a la fórmula de derecho de superficie, las viviendas también se construirán en suelos de titularidad pública, en distintas localidades. En este modelo, señala Bayona, "Nasuvinsa para este caso va a tener un control absoluto sobre la construcción y la gestión de estas viviendas porque establece en los propios pliegos estrictas condiciones de gestión que vienen a replicar lo mismo que está haciendo con el parque propio de alquiler y con la bolsa de vivienda en alquiler. Al término del periodo de explotación, Nasuvinsa se quedará en propiedad con el suelo y con las viviendas".

Por último, este plan se va a complementar con las estrategias para incentivar a empresas y grandes tenedores a que saquen al mercado las viviendas vacías. La directora general de Vivienda, Ana Bretaña, ha avanzado que en estos momentos se está en una fase de "convencimiento" con estas entidades, ofreciéndoles ayudas y subvenciones para rehabilitar y gestionar los alquileres. En cualquier caso, el Ejecutivo trabaja para habilitar un mecanismo que permita expropiar algunas viviendas. Bretaña ha añadido que "en total, el sistema público de alquiler del Gobierno de Navarra ha generado desde 2015, por distintas vías y gracias a distintas políticas activadas, un total de 7.327 nuevas viviendas de alquiler asequible, lo que supone multiplicar casi por diez las 769 nuevas viviendas que se fueron incorporando durante los ocho años anteriores". En otro orden de cosas, el programa de la Bolsa de Alquiler de Nasuvinsa de pisos en desuso cedidos por titulares particulares ha duplicado el número de viviendas adscritas, ha señalado Aierdi, pasando de las 475 existentes en 2015 hasta las 902 actuales.