Rusia rechaza devolver el territorio ocupado en Ucrania y negociará con Estados Unidos la explotación de recursos en el Ártico

El Kremlin descarta siquiera plantear ceder el territorio que ha ocupado en Ucrania en unas futuras negociaciones de paz. El portavoz del gobierno ruso ha admitido este jueves que en su ronda de negociaciones con Estados Unidos no se plantea la devolución del Donbás ni de Crimea. Hoy delegaciones de ambos países han estado reunidas durante más de seis horas en Estambul después de la primera toma de contacto de hace unos días en Riad.

Dmitri Peskov ha explicado que "los territorios que se convirtieron en entes de la Federación Rusa y figuran en nuestra Constitución son parte inalienable de nuestro país. No es objeto de debate". Después de la invasión, Putin reformó el artículo 65 de la Constitución de Rusia para incluir como parte de su territorio las regiones ucranianas ocupadas de Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia.

Las decisiones sobre Ucrania no van a ser fáciles ni rápidas

—  Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin

Peskov ha ofrecido más detalles de lo que se está hablando con Estados Unidos, aunque ha vuelto a insistir que el proceso de recuperación de las relaciones bilaterales va para largo.

Negociación sobre el Ártico

En su conversación telefónica diaria con periodistas, Peskov ha admitido que Rusia está dispuesta a hablar con Estados Unidos sobre la explotación de recursos en el Ártico. Esta zona del mundo se ha convertido en un punto de especial interés geoestratégico después de que Donald Trump haya mostrado su deseo de hacerse con Groenlandia y una vez que el deshielo hace cada vez más factible la navegación por el extremo norte del planeta.

Las negociaciones en Turquía tienen como objetivo acercar posiciones sobre la cooperación entre ambas naciones a nivel del trabajo en embajadas, pero desde este miércoles medios como Bloomberg apuntaban a que la delegación estadounidense pretendía presentar una posible coordinación en la explotación del Ártico para debilitar la alianza económica y energética entre Rusia y China.

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Tanto Rusia como siete países miembros de la OTAN (Estados Unidos, Canadá, Dinamarca, Finlandia, Islandia, Noruega y Suecia) tienen costas en el Ártico e intereses en toda esa parte del mundo. China ha mostrado su intencióón de aumentar su influencia en este territorio e incluso trabaja con un proyecto de nuevas rutas marítimas, lo que llama "La Ruta de la Seda Polar", para conectar Asia Oriental, la parte occidental de Europa y Norteamérica.

Optimismo de Putin

Pasado el mediodía, Vladimir Putin ha presidido un acto con miembros de la FSB, la antigua KGB, a los que ha agradecido su colaboración en la invasión de Ucrania. El presidente ruso ha vuelto de nuevo a hablar en un tono positivo de Donald Trump, a quien contrapone con la Unión Europea, que sigue siendo partidaria de respaldar a la resistencia ucraniana.

Según Putin, "los participantes estadounidenses en la reunión ven que está cambiando la situación en el mundo con rapidez, por lo que tengo que decir que los primeros contactos con ellos inspiran ciertas esperanzas". El mandatario ruso ha pedido además a los servicios de Inteligencia que trabajen para "evitar los intentos de interrumpir las negociaciones con Estados Unidos", de los que ha culpado a "élites occidentales" de las que no ha dado ningún detalle.