Aznar y Feijóo deben pedir perdón

Barcelona

Tiene razón Alberto Núñez Feijóo: hay que ir a los "siguientes pasos". Está muy bien que los siete candidatos de Bildu que fueron condenados por delitos de sangre cuando eran terroristas de ETA hayan renunciado a concurrir a las elecciones. Y en cualquier caso, a convertirse en concejales. Es un éxito de la pedagogía política, de la presión democrática, de la idea según la cual convencer es lo más decisivo para vencer: no basta la legalidad; es imprescindible la decencia.

Pero no es suficiente. Hay otros que también rectificar. Y sobre todo, entre los sepulcros blanqueados que se escandalizaron. Debe rectificar José María Aznar, que siendo presidente del Gobierno mientras ETA mataba a mansalva, proclamó en 1998 que los terroristas conformaban un supuesto "Movimiento Vasco de Liberación". Un intento de blanqueo de la violencia y una expresión del todo filoterrorista de la que aún no se ha arrepentido. Este Aznar, que además presidió el más nutrido colectivo de corruptos que jamás haya constituido un Gobierno de España; que los invitó a la boda de su hija con el traficante amigo de Berlusconi; que votó contra la Constitución y ahora se proclama constitucionalista, debe tantas explicaciones como los terroristas a los que tanto benefició.

Y también un alto funcionario suyo, secretario general de Sanidad y presidente entonces del Insalud. Se llamaba y se llama Alberto Núñez Feijóo. No levantó la voz contra la indecencia de su jefe. Y ahora presume de antiterrorismo. Era entonces cuando debió demostrarlo. Ser decente solo cuando acabó el partido es miserable. Pidan perdón Aznar y Feijóo a las víctimas que ofendieron. A todos nosotros. Y haya paz.