¿Un nuevo país en el Pacífico? El independentismo gana las elecciones en la Polinesia Francesa

A 17.000 kilómetros de París Francia aún mantiene el control de algunas islas de Polinesia, la llamada Polinesia Francesa que cuenta con más de un centenar de islas donde viven cerca de 275.000 personas. Esta región dispone de una cierta autonomía con un presidente propio, una asamblea y representación diplomática en el Pacífico, pero es Francia quien por ejemplo se encarga de su defensa. Este mes de abril se han celebrado elecciones a dos vueltas y hoy se han conocido los resultados definitivos que muestran que la mayoría de la asamblea va a quedar en manos de las fuerzas independentistas. Han logrado una mayoría absoluta en unos comicios que suponen el mayor golpe electoral de su historia para las formaciones que aún quieren seguir dependiendo de París.

Los ganadores plantean una negociación con la metrópoli para iniciar el proceso de descolonización y llegar a un referéndum de autodeterminación. De momento, desde el gobierno francés, la respuesta a los resultados electorales es un tweet del ministro del Interior en el que habla de "continuar mejorando la vida cotidiana de nuestros conciudadanos polinesios", lo que indica que no hay intención desde el Elíseo de varias el estatus actual del territorio de ultramar. El futuro presidente de este territorio, Moetai Brotherson, reconoce en todo caso que ese proceso puede llevar "diez o quince años".

Más allá de las reivindicaciones más tradicionales del independentismo polinesio, los ciudadanos de estas islas han mostrado además con su voto su rechazo a un nuevo impuesto anunciado por los partidos autonomistas en una zona en la que la inflación se situó el pasado año en el 8,5%. Ese rechazo se ha unido al deseo de una mayor soberanía y a la lucha por la compensación por las pruebas nucleares que Francia llevó a cabo en esta zona del mundo desde finales de los años 60. Solo en 2021 aceptó París iniciar una mesa redonda sobre este asunto a la que no invitó a los dirigentes favorables a la independencia, por lo que tampoco acudieron las principales asociaciones de víctimas de la radiación.

Territorio No Autónomo, según la ONU

Naciones Unidas incluyó a la Polinesia Francesa como uno de los Territorios No Autónomos del mundo en el año 1946, pero apenas duró un año en esa situación. Sin embargo, al comprobar las carencias en algunos elementos de su autogobierno, la ONU volvió a incluirla en esa lista en el año 2013. Esa lista incluye a territorios cuyos pueblos, según la propia resolución de Naciones Unidas, "no han alcanzado todavía la plenitud del gobierno propio".

Esa resolución apela a las potencias que controlen estos territorios a que "se comprometan a ayudarlos a lograr la libre determinación", pero hasta 2019 Francia no había cooperado con el comité de Naciones Unidas responsable de asuntos relacionados con la colonización por considerar las demandas de Polinesia como un asunto interno.