A vivir que son dos díasLa píldora de Tallón
Opinión

Destrúyelo todo

"La obra que un escritor no publica, y que sirvió de escalón a nuevos y mejores libros, va quedando atrás, hasta habitar una oscuridad cómoda"

Destrúyelo todo

Destrúyelo todo

02:20

Compartir

El código iframe se ha copiado en el portapapeles

<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1682849602673/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>

Galicia

Escribir es fácil. Escribir bien es bastante difícil. Destruir lo que un día escribiste, aunque no pretendas publicarlo, es dificilísimo. En una lucha fratricida contra sí mismo, el autor a menudo archiva y olvida los textos de sus comienzos literarios, sin llegar nunca a eliminarlos. Ya se sabe que resolver un debate por el método de la inacción es una tentación universal. Pero cuando el autor fallece, y sus descendientes dan con los manuscritos, pueden muy fácilmente acabar viendo la luz, porque es más sencillo asumir tu propia piel que la del autor, que deseaba lo contrario. Esta historia se repite sin parar. Ahora le toca a Vázquez Montalbán. Cuando quiso publicar su primera novela, no lo consiguió, y quizá cuando pudo, optó no hacerlo. Ahora, que está muerto, saldrá a la venta. La obra que un escritor no publica, y que sirvió de escalón a nuevos y mejores libros, va quedando atrás, hasta habitar una oscuridad cómoda. Eso le ahorra al escritor acordarse de ella de vez en cuando. Pero entre no querer saber nada del manuscrito, y destruirlo para perderlo de vista para siempre, media un ligero abismo. Aferrarse a un viejo texto, del que a la vez se reniega, escapa a la razón. Simplemente, pasa. El precio es que acabe publicado. Así que, si no quieres que ese suceda, escritor, no dejes nada para tus sucesores. Destrúyelo todo.

 
  • Cadena SER

  •  
Programación
Cadena SER

Hoy por Hoy

Àngels Barceló

Comparte

Compartir desde el minuto: 00:00