José María Camarero: "Hablemos de la nómina o la hipoteca sin tabúes. No pasa nada por hablar de dinero"

Madrid

¿Te has fijado en la factura de la luz, más allá del monto final que hay que pagar? ¿Sabes qué potencia tienes contratada con la empresa? ¿Sabes incluso con qué empresa tienes contratada la comercialización de la luz? Estas son solo algunas de las preguntas que resuelve el periodista económico José María Camarero en 'Crisisfobia: claves para sobrevivir al apocalipsis económico' (HarperCollins); un ligero libro repleto de consejos sobre cómo ahorrar en el día a día y hacer al consumidor más fuerte respecto a la información bancaria, de la luz, el gas, la inflación, las pensiones o los impuestos que pagamos. En la entrevista con Aimar Bretos, en Hora 25, lo tiene claro: lo último en lo que hay que fijarse es en el precio final de la factura.

"Estábamos muy acostumbrados a que nos llegara un recibo y pagáramos 50, 100, 200 euros. Nos resignábamos. No hacíamos nada más. Se trata de ir un paso más atrás y ver cuánta potencia tenemos contratada, qué tarifa tenemos, si tenemos derecho al bono social u otro tipo de medidas que desconocemos por completo. Esa es la gran paradoja de la guerra de Ucrania y la crisis, que nos ha abierto los ojos a los consumidores", explica Camarero. Hay tres aspectos fundamentales en la factura de la luz: la potencia contratada, qué tarifa tenemos y el bono social.

Sobre estos tres pilares, el periodista recomienda lo siguiente:

-Potencia contratada: "La mayor parte de la población tiene contratada más potencia de la que necesitamos. Entre 4 y 4,5 kilovatios es una potencia estándar para que no nos salten los plomos y tengamos un consumo normal. Mucha gente tiene 5, o 5,5 y 6 y eso puede ser un ahorro fundamental", señala el periodista.

-Qué tarifa tenemos: "Pagar ahora mismo más de 15 o 20 céntimos kilovatio/hora es mucho dinero. Estamos dejándole mucho dinero a la compañía de turno. Pagar 15 está bien y pagar menos hay que agarrarse a esa oferta durante los próximos meses", asegura el autor.

-El bono social: "Hay muchísima gente que podría tener derecho al bono. Es un descuento de hasta el 80% en la factura y mucha gente lo desconoce. Hay gente pagando 30 o 40 euros", dice.

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A la hora de negociar, dice el periodista, una compañía "no quiere perder clientes". "Las compañías están deseando tenernos en su cartera de clientes, así que es factible decirles que te vas a ir y seguro que te hacen una oferta mejor", afirma. "Tenemos más cuota de mercado o poder del que creemos o nos han hecho creer", sentencia.

En 'Crisisfobia' hay todo un compendio de medidas para ahorrar en pequeños hábitos de consumo diarios. "Los modos 'eco', aunque parezca que duran mucho, ahorran hasta un 30% o 40% de energía. Acostumbrarnos a no utilizar temperaturas extremas. Cada grado que subimos o bajamos la temperatura estamos ahorrando o incrementado un 7% el gasto. No se trata de volver a las cuevas, sino un cambio de hábito o mentalidad que en la gente joven está mucho más arraigado", explica el periodista.

¿Cómo ahorrar en el presupuesto familiar o personal? "Lo más importante es anticiparse. Normalmente cuando cobramos una nómina o tenemos unos ingresos, primero lo dedicamos a los gastos fijos, después a gastos ordinarios que pueda haber y al ocio. Y ya al final, si nos queda algo, lo dedicamos al ahorro. Se trata de anticipar el ahorro. Antes de empezar a salir, ahorrar. Hay una regla financiera que dice que hay que ahorrar un 20% o 30% de lo que cobramos. Eso es imposible, pero igual podemos empezar por ahorrar 20 euros, o 25", señala.