Arrancan las primeras rebajas de enero sin restricciones por la pandemia

Madrid

Tras la visita de los Reyes Magos, mañana sábado comienzan las rebajas de enero, que este año serán las primeras sin las restricciones que se impusieron en 2021 y 2022 para evitar el contagio del coronavirus. Aunque quizás habría que hablar de 'rebajas de invierno'. Porque, dependiendo de cada comunidad autónoma, las rebajas empiezan a principios de este mes y terminan a principios o finales de marzo. Las más adelantadas son las de Madrid y Murcia, donde arrancaron el 1 y el 2 de enero, y las que terminarán más tarde, el 31 de marzo, son las de Castilla-La Mancha y -de nuevo- Madrid.

Ante el actual escenario de inflación alta, aunque contenida en los últimos meses, muchas personas se lanzarán a buscar los mejores descuentos y otras se quedarán en casa o recortarán su presupuesto, afectado este año por los altos precios de la cesta de la compra o del recibo de la luz y el gas, o por el encarecimiento de las hipotecas. Según una encuesta de la Asociación Española de Consumidores (Asescon), el 67% de los consumidores comprará en las rebajas de enero, con un gasto medio de 135 euros. Un estudio realizado por el comparador financiero Banqmi rebaja el gasto medio por consumidor hasta los 94,38 euros: un 2% menos que el año pasado, cuando se alcanzó la cifra de gasto de las rebajas de 2020, previas a la pandemia.

Las grandes superficies prevén superar la facturación de 2022 en el periodo de descuentos que se encadenan entre el Black Friday, la campaña de Navidad y las rebajas de enero. “Podemos estar hablando en términos generales, dependiendo de la categoría, de en torno a un 9% o un 10% más que el año pasado. Y si no alcanzamos las cifras de 2019, que sería un poco la referencia, nos vamos a quedar muy cerquita: un punto o dos puntos por debajo”, explica Joaquín Cerveró, portavoz de la patronal ANGED en la Comunitat Valenciana, en declaraciones a Radio Valencia. “Estamos muy ilusionados porque lo mismo que esta Navidad ha sido la primera sin restricciones y el resultado ha sido bastante positivo, confiamos en que las rebajas también lo sean”, señala. En su opinión, el hecho de que las rebajas comiencen en fin de semana servirá para estimular las compras.

Menos optimistas con las ventas se muestran los pequeños comerciantes. “Comparado con el año pasado, yo creo que estaremos a la par, si no un 10% menos”, comenta a la Cadena SER Domiciano Curiel, portavoz de comercio de la Asociación de Trabajadores Autónomos, quien descarta que la facturación se vaya a acercarse a los niveles previos a la pandemia: “Hay que tener en cuenta que el ciudadano tiene miedo, se le ha subido la cesta de la compra, los gastos de calefacción... Y depende en qué zonas, si son más o menos envejecidas, se es más o menos conservador y a la hora de consumir se puede retraer un poco”. Curiel considera que una campaña navideña con los días festivos en fin de semana beneficia más a las grandes ciudades que a las pequeñas.

Como cada año desde que en 2012 se aprobó la ley que liberalizaba las rebajas, el pequeño comercio vuelve a quejarse de que no puede competir con las grandes superficies. Antes, los periodos de descuentos se limitaban a dos anuales, invierno y verano, pero desde hace diez años cada negocio puede decidir sin limitaciones cuándo realiza su campaña de descuentos y cuánto descuento aplica. Esto perjudica a las empresas pequeñas, que no disponen de márgenes de beneficios ni de 'stock' de producto para igualar las estrategias comerciales de las grandes.

“No se puede estar continuamente de rebajas, eso tendríamos que analizarlo”, afirma Curiel. “No se puede estar con un 50% [de descuento] y luego ese mismo producto ponerlo a precio normal. Algo en estas cadenas no se hace bien y así lastran a los pequeños, que no podemos llegar a esas prácticas, que, desde luego, no hacemos”, concluye.