Las familias españolas ante la cuesta de enero de 2023: "Antes había una fecha marcada en el calendario, ahora son todos los meses"

Madrid

Con el fin de la Navidad, llega la cuesta de enero de 2023 y muchos españoles comienzan a echar cuentas. En la familia de Ángeles son ocho: su marido, su madre, sus tres hijos y sus dos sobrinos, a los que han acogido. Esta mujer de 47 años es la única de su familia con un sueldo a final de mes. Su marido está en paro y viven en casa de su madre porque no pueden permitirse pagar un alquiler. Viven con 650 euros al mes. “Es imposible ahorrar. Ha subido todo. La cuesta de enero va a ser muy dura. Todo lo que gano ahora lo dedico exclusivamente a mis hijos”, afirma. La subida prolongada de los precios en los alimentos, la energía, los carburantes o el transporte -provocada por los efectos de la guerra en Ucrania- afecta directamente a la economía de millones de familias en España.

La tasa de variación anual del IPC (Índice de Precios al Consumo) del mes de diciembre se sitúa en el 5,8%, la tasa más baja en todo el año, acumulando cinco meses consecutivos de descenso. Pero esta moderación de los precios no llega a los alimentos que siguen aumentando de precio. De hecho, la inflación subyacente sube seis décimas en diciembre y alcanza el 6,9%, volviendo a situarse por encima de la general por primera vez en casi dos años. En la familia de Ángeles han cambiado el supermercado por las tiendas del barrio donde encuentran los productos más baratos.

Hace seis meses desayunaban todos los días magdalenas con un vaso de leche, pero desde que este alimento paso de costar un euro a cuatros, lo han cambiado por las galletas más baratas de los pasillos de repostería. “Nosotros, los adultos, podemos comer pan con sal todos los días, pero ellos necesitan alimentos que les proporcionen nutrientes”, afirma esta madre de familia de 47 años.

Organizaciones como Save the Children ayudan a familias como la de Ángeles desde hace más de 100 años. En este caso, desde esta ONG, proporcionan a esta familia de Valencia refuerzo escolar y actividades de ocio para sus hijos para que tengan lo imprescindible en el ámbito educativo y personal. Una ayuda sin la que Ángeles no podría continuar. “Ahora vivo de los apoyos que me dan. Agradezco que mis hijos pueden ir al comedor y que me hayan concedido la ayuda para los libros. Muchas veces tengo que recurrir al banco de alimentos para poder comer en casa”, afirma. Para este nuevo año, Ángeles solo pide salud y trabajo, aunque asegura que la cuesta de enero va a ser “muy complicada” económicamente para su familia.

Afectados por la subida del Euribor

En el caso del Euribor, el indicador de referencia para fijar el interés hipotecario, termina diciembre por encima del 3% por primera vez en 14 años. Diciembre es el duodécimo mes consecutivo en alza y el Banco Central Europeo ya ha anunciado que los tipos de interés seguirán subiendo en 2023. En España, hay 4 millones de personas que tienen contratada una hipoteca de tipo variable y, desde septiembre, han visto incrementadas sus cuotas en un gasto medio de entre 124 y 288 euros más al mes.

Miguel es uno de los afectados por esta subida y ha visto incrementado el gasto de su hipoteca variable en 150 euros. Este hombre de 54 años vive en un cuarto piso de 70 metros cuadrados sin ascensor en uno de los barrios a las afueras de Madrid y la subida ha provocado que de una cuota de 700 euros ahora este pagando casi 900 euros. “Ahora me están ayudando mis familiares hasta que puedan. Es una situación económica muy complicada que no sé cómo afrontar porque tampoco tengo muchas opciones de aumentar los ingresos”, cuenta.

En la actualidad, Miguel gana 1.300 euros al mes como comercial en Madrid y desde el momento en el que ese sueldo le entra en su cuenta, tiene que sacar la calculadora: hay que restar la pensión a su exmujer de 400 euros y los 850 de la hipoteca, 150 euros más que en septiembre. Ahora solo le quedan 50 euros para todo lo demás. Esta situación provoca en Miguel “desesperación” y hace que para él cada mes se haya convertido en una cuesta de enero: “Antes era una fecha marcada, pero ahora es todos los meses”.