La resistencia de Azovstal: los últimos soldados ucranianos que sobreviven entre los túneles de la acería de Mariúpol

Madrid

Hace cinco días, la viceprimera ministra de Ucrania, Iryna Vereshchuk, confirmó que todos los civiles que se refugiaban en la acería de Azovstal, en Mariúpol, habían sido evacuados. Sin embargo, a principios de este mes, el mando del batallón de Azov, los últimos ucranianos que defienden la planta, aseguraron que resistirían "mientras haya vida". Todavía hoy, permanecen atrincherados frente a los ataques del ejército ruso, que han bloqueado en las últimas horas las salidas de los pasajes subterráneos de la gigantesca planta.

Según ha informado el asesor del alcalde de Mariúpol, Petro Andriushchenko, en su cuenta de Telegram, pese a que las tropas rusas han bloqueado esas salidas en la planta, "los defensores ucranianos están lanzando contraataques".

La instalación siderúrgica es el último reducto de la resistencia ucraniana en la zona, después de que los rusos se hayan hecho con el control de la ciudad y sus alrededores tras más de dos meses de asedio en el que la urbe costera ha quedado prácticamente destruída.

“Ayer el enemigo no detuvo sus intentos de asalto. El objetivo clave es bloquear las salidas de los pasajes subterráneos, que un traidor le ha mostrado al enemigo. Sin embargo, los defensores de Mariúpol están efectuando contraataques, arriesgándolo todo. No hay palabras para describir el heroísmo de los defensores de Mariúpol”, ha señalado Andriushchenko. El Ejército ruso ha usado artillería pesada, tanques y bombardeos desde el aire para atacar la acería.

Los últimos combatientes de Azovstal

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