Hablemos de futuro

Cartagena

Buenas tardes Cartagena,

¿Cuándo pero sobre todo cómo llegará el cambio definitivo para que está ciudad se ponga en marcha de una vez? Me hago esta pregunta y la comparto con ustedes. Lo hago porque a día de hoy cuando salto a otra ciudad de europa ya sea físicamente o a través de alguna visualización que nos aportan las redes sociales, noticias,...y veo los cambios que allí se suceden me pregunto ¿Y aquí? ¿Cuándo tocará?

Me sigo parando en cualquier esquina de la ciudad y no lo veo; la veo sucia, cada vez con más cemento, hormigón, sin bicis por las calles, sobre todo sin niños en bici por las calles, llena de coches,...faltan árboles y parques y también empresas que llenen nuestros polígonos, falta más universidad que no dejan crecer y sobra centralismo en esta comunidad, trenes que lleguen- no que se proyecten- y sobran aeromuertos que pagamos todo, faltan inversiones y comunicaciones con Andalucía o Alicante- y no de peaje- y sobran puertos mal gestionadas levantando suelos por tercera o cuarta vez a 4 millones de euros la factura. Sobran bares y falta gente cualificada que se nos va, población y renta que no deja de decrecer en nuestra ciudad. Pero sobre todo falta cultura y espíritu crítico que entre otras denota el mayor logró y riqueza que puede alcanzar una sociedad y también, el aprovechamiento social del conocimiento tal y como decía el genial Gabriel García Marquez. De todo ese inmovilismo esto último ya les digo que es lo que más le pesa a mi ciudad, déjenme que les explique; esta semana pasada , un buen amigo mío, inteligente, trabajador y preparado entre los preparados me dio una de esas noticias agridulces que da la vida, de las que alegran pero muestran la dura realidad entre los harapos en que han convertido esta Cartagena. Mi amigo Ramón , tras algo más de un año de esfuerzo aprobó su examen para por fin acceder a un trabajo a la altura y marcharse a Bruselas con su pareja, mi querida María y tres tesoros que han conformado una familia luchadora y valiente donde las haya. Sí, se van al filo de la cuarentena y no porque quieran sino porque esta tierra no les deja progresar, no les da oportunidades, menos aún al talento y sí, claro que tiene responsables, los que llevan cuarenta años lastrando esta ciudad y región . Se van, sí , y lo hacen con la alegría y la fuerza de una familia unida a las que le esperas lo mejor. Con la responsabilidad de saber que un futuro mejor les aguarda a ellos y sobre todo a sus hijas. También de que los visitaremos.

Algunos otros nos quedamos y yo, por mi parte , por ahora, con el férreo compromiso que cada día me cuesta más eludir de cambiar las cosas para que podáis volver , para que nadie más tenga que irse por no encontrar futuro en esta tierra.

Todos tenemos la obligación de hacerlo, quitar la mirada, escurrir el bulto no es una opción. Porque repito, como decía Marquez el mayor logró y riqueza que puede alcanzar una sociedad es el aprovechamiento social del conocimiento. Dejar escapar a mi amigo Ramón y a su familia tampoco es una opción.

Buenas tardes Cartagena y buen viaje amigos!

Santiago del Álamo.